La Asociación Ocio de Ibiza considera que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears (TSJIB) que anula la Ordenanza de Ruidos y Vibraciones del municipio de Sant Josep es una oportunidad alcanzar un consenso en esta materia con el Ayuntamiento de Sant Josep.
El gerente de la asociación, José Luis Benítez, explicó que la asociación se ofreció «desde un primer momento» para plantear sus ideas y su posición al Ayuntamiento respecto a la ordenanza. Es por ello que se mostró crítico con el Consistorio por no haber hecho la consulta previa al texto que motivó el recurso contencioso-administrativo y que llevó al TSJIB a anular la ordenanza.
Consideró que la ordenanza se ha aplicado correctamente durante estos dos años, pero ahora «hay que sentarse y tratar este tema».
«Creo que el Ayuntamiento de Sant Josep ha demostrado tener mano dura con el que hace las cosas mal, pero nosotros como Ocio de Ibiza hemos demostrado que nuestros asociados están haciendo las cosas bien. El reflejo principal es que los informes de la Policía Municipal reflejaban que había disminuido de una forma increible las quejas de vecinos por el ruido de los locales de ocio y que la mayoría de problemas eran en fiestas en villas».
Respecto a los aspectos que la asociación considera que deberían modificarse, Benítez explicó que la limitación de decibelios en exteriores «se debería tratar». Consideran que sería posible ampliar ese límite sin perturbar la convivencia, si bien en este aspecto quiso subrayar «que en ningún caso se va a pedir un horario que vaya más allá de la medianoche para respetar el descanso de los vecinos que es sagrado».
Benítez también mencionó como tema a tratar la obligación de instalar limitadores de sonido. «Ya están comprados porque los tuvimos que instalar en su momento, pero respecto al uso de esos limitadores se puede llegar a un punto de encuentro».
Respecto a la actividad este verano, recordó que el propio concejal de Urbanismo y Actividades manifestó respecto a este tema a la Televisió d'Eivissa i Formentera (TEF) que confiaba en que los empresarios se siguieran comportando como pertoca en materia de ruidos. «El propio Ayuntamiento sabe que el sector está cumpliendo, así lo reflejan los informes policiales de los dos últimos años, como están ahora las cosas hay que estar a la altura de las circunstancias y creo que nos entenderemos perfectamente con el Ayuntamiento».
Anulación de ordenanzas
El TSJIB declaró nulas en sendas sentencias dictadas a finales del año pasado la Ordenanza Reguladora del aforo máximo de actividades y la modificación de la Ordenanza de ruido y vibraciones. En ambos casos el Tribunal consideró que el Consistorio no cumplió con el trámite de información pública previo a la aprobación inicial de los textos normativos, por lo que la nulidad es por un defecto de forma en la tramitación, no por el contenido de las mismas.
Desde el Ayuntamiento indicaron que se volverán a tramitar las dos ordenanzas, cumpliendo con el trámite de información pública conforme indica el tribunal.