El Ministerio Fiscal solicita una pena de tres años y medio de prisión y 800 euros de multa para un hombre de origen irlandés que mañana se sentará en el banquillo de los acusados para responder por un delito contra la salud pública después de ser detenido en Sant Antoni en el verano de 2018.
Según el escrito de acusación, el acusado fue sorprendido por agentes de la Policía Local de Sant Antoni cuando se encontraba trapicheando con sustancias estupefacientes en la zona del West.
La intervención se produjo la noche del 5 de agosto y los agentes le hallaron en uno de los bolsillos del pantalón un total de 17 bolsitas que contenían 9,45 gramos de éxtasis.
Asimismo, al individuo también se le intervino un envoltorio con 0,46 gramos de ketamina. El escrito del Ministerio Fiscal apunta que la droga intervenida le habría reportado unos 375 euros.