Médicos, enfermeras, auxiliares, celadores y personal administrativo del Área de Salud de Ibiza y Formentera y de la clínica privada, agentes del Cuerpo Nacional de Policía, policías locales de todos los municipios, guardias civiles, bomberos, profesores, periodistas, empleadas de supermercados… Cuando faltan cuatro días para la prueba piloto que permitirá, si todo sale bien, la posterior apertura de las discotecas, cerca de un millar de trabajadores de las Pitiusas cuya labor fue esencial durante la pandemia ya se han apuntado a la fiesta del viernes en el Hard Rock Hotel Ibiza, una cita con Children of the 80's que contará con la actuación de un grupo estelar.
En este establecimiento de Platja d'en Bossa se ultiman los preparativos para esta prueba que es considerada crucial para la reactivación de la industria del ocio diurno y nocturno. Si los resultados que analizará la conselleria de Salud del Govern balear demuestran que no se han producido contagios durante esta fiesta, a partir del 3 de julio ya se podrían ir anunciando las fechas de opening de las principales discotecas de Ibiza, que permanecen cerradas desde octubre de 2019 y de cuya reapertura están pendientes los hoteleros y numerosas empresas de Ibiza, así como decenas de miles de jóvenes de todo el mundo que visitan la isla cada año atraídos por la música electrónica y el espectáculo nocturno de los clubs.
En paralelo a la fiesta de Ibiza, en Mallorca se llevará a cabo una experiencia semejante el mismo viernes 25 con el concierto al aire libre de Sidonie en el Mallorca Life Festival. Al día siguiente, el sábado 26, otra fiesta experimental en una discoteca de Mallorca, en este caso sin terrazas, permitirá completar el experimento para obtener resultados sobre la incidencia del virus en estos eventos en el plazo aproximado de una semana.
La prueba piloto en el Hard Rock, en Platja d'en Bossa, se realizará con 1.500 invitados, un aforo que se espera cubrir con los trabajadores esenciales en las próximas horas. En el caso de que no se cubrieran todas las invitaciones, se abriría la posibilidad de inscripción al público en general mediante una página web donde se reflejarán las plazas que queden libres. Eso sí, sólo podrán acceder las personas que ya estén vacunadas o que se hayn realizado una prueba de antígenos o PCR en vísperas de la fiesta.
Zonas acotadas
El área del escenario y la piscina del Hard Rock, perteneciente a la cadena ibicenca Palladium Hotel Group, será organizada en cuatro zonas con mesas y sillas en las que se podrá beber sentados y se podrá estar sin mascarilla, mientras que en la zona acotada para el baile no se podrá consumir bebidas y será obligatorio el uso de mascarilla, un protocolo que será estrictamente vigilado por personal de seguridad.
El gerente de la Asociación Ocio de Ibiza (AOI), José Luis Benítez, expresó ayer su confianza en que la prueba saldrá bien y que «a partir del 3 de julio podría comenzar la apertura escalonada de las discotecas», que de facto podría producirse a mediados o finales de julio, según distintas estimaciones.
La patronal del ocio, que agrupa a más de 40 de las principales marcas del sector en Ibiza, lleva semanas preparando este evento en colaboración con las autoridades sanitarias y políticas, una prueba que ya se ha llevado a cabo con éxito en distintos puntos y escenarios de España en los últimos días y que ahora llega a Ibiza con la esperanza más que fundada de que sirva para retomar una relativa normalidad en plena temporada turística.