La Policía Local de Sant Antoni intervino en la noche del domingo al lunes en una fiesta ilegal celebrada en una vivienda particular ubicada en el camí de s'Olivera, en dirección Sant Rafel, donde había 75 personas y un total de 48 vehículos estacionados.
Según informaron ayer desde el Consistorio, los agentes, con apoyo de una dotación de la Guardia Civil, procedieron bajo conformidad del promotor a inspeccionar el jardín donde se llevaba a cabo la fiesta. Durante la inspección, se comprobó que había una persona realizando funciones de dj con un equipo de música profesional y gente bailando sin mascarilla y sin mantener la distancia de seguridad. La parcela estaba señalizada con carteles de ‘entrada' y ‘salida' y disponía de barras y mesas con alimentos y bebidas tipo buffet. Los agentes identificaron al promotor de la fiesta interponiendo una denuncia por infracción de la ordenanza municipal de ruidos y vibraciones, otra denuncia por infracción de la Ley 7/2013 de régimen jurídico de instalación, acceso y ejercicio de actividades en las Baleares y un acta Covid-19 por incumplimiento de las medidas sanitarias. Además, se incautó de forma provisionalísima el equipo de música.
Por otra parte, durante la noche de ayer, dos patrullas de la Policía Local desalojaron a centenares de personas congregadas en la playa y paseo de s'Arenal tras el cierre de los establecimientos, sin producirse ningún altercado. Los agentes actuantes intervinieron un total de cinco altavoces utilizados por los turistas, que causaban molestias al vecindario por los ruidos de música, procediendo a la denuncia de dichos infractores por infringir la ordenanza municipal del ruido y vibraciones.
La Policía Local dispone de un operativo especial que actúa de forma continua en las zonas costeras del municipio a partir de las 02.00 horas, coincidiendo con el cierre de los locales de ocio, para disolver posibles aglomeraciones en playas y paseos, además de los dispositivos por botellón habituales.
Balance semanal
En la última semana, la Policía Local ha interpuesto una denuncia a un local por tener música trascendiendo hacia el exterior sin disponer de la autorización administrativa de la autoridad competente. También han levantado 16 actas en domicilios por tener música a un volumen elevado causando molestias a los vecinos, ocho actas por consumo o tenencia ilícita de drogas o estupefacientes en lugares públicos y otras diez denuncias por faltar al respeto, desobediencia o resistencia a los agentes de la autoridad.