Los afiliados de El Pi de Sant Antoni decidieron, por unanimidad y con voto secreto, la continuidad de su partido en el equipo de gobierno de la Villa de Portmany pese a las grandes discrepancias escenificadas por las tres formaciones (PP, Ciudadanos y El Pi) en los últimos meses.
Según señaló el concejal de Proposta per Eivissa en el Consistorio, Joan Torres, la idea que le transmitieron los afiliados de su partido es «continuar con un espíritu constructivo, pero reivindicativo» y dejó muy claro que «si tenemos alguna discrepancia o si no aclaramos antes de un plenario cualquier cosa, votaremos en contra».
Torres reconoció sentirse «muy cómodo» con esta decisión «porque siempre he pensado que los cambios hay que hacerlos desde dentro», aunque dijo que también se hubiera sentido cómodo si la decisión de los afiliados hubiera sido la de seguir trabajando desde la oposición.
El concejal de Obras Públicas y Transportes de Sant Antoni quiso dejar claro que en ningún momento pesó en esta decisión la postura adoptada por el Grupo Municipal PSOE-Reinicia de descartar a estas alturas de legislatura una moción de censura, así como tampoco se planteó la desventaja que supone encarar unos comicios electorales desde la oposición. «No se habló en ningún momento de la dificultad o no de acudir a unas elecciones fuera del equipo de gobierno», insistió el edil, «en estos momentos no estamos pensando en el 2023, sino en seguir trabajando».
Una labor la del equipo de gobierno que, en estos dos años, calificó con «un aprobado», al igual que su trabajo al frente de las concejalías que le fueron asignadas. «Me hubiera gustado sacar un 10», indicó, pero «si no hubiéramos sacado un ‘aprobado' en estos dos años nuestros afiliados hubieran votado la salida del equipo de gobierno».
«Muy complicado»
Joan Torres analizó, a su vez, el día a día del pacto de gobierno municipal y reconoció que, al tratarse de tres partidos, «es muy complicado», especialmente para el Partido Popular que, según dijo, nunca había tenido que pactar en el municipio para gobernar.
Entre otras cosas, el concejal de El Pi reconoció que «ha habido diferencias» en el seno del equipo de gobierno «que a lo mejor han tenido más eco de lo que realmente han sido». «Sólo en tres ocasiones ha habido discrepancias en plenos, y no considero que esto sea grave», apuntó.
Además, según manifestó, estas discrepancias han sido por cuestiones que no estaban incluidas en el pacto de gobierno. «Lo que esté fuera del pacto tiene que llegar consensuado a los plenos», adelantó, «y el no lo vea así le falta talante democrático».
«Me gustaría haber hecho más»
Torres tuvo un asomo de autocrítica al asegurar que «me gustaría haber hecho más en las competencias que tengo asignadas», aunque acto seguido sacó pecho de que su concejalía «en proyectos ejecutados hemos sobrepasado ya los seis millones de euros, y a día de hoy están adjudicados o en marcha otros 3,5 millones y una serie de proyectos previstos que da gusto mirarlos».
Dos años después, sin Reglamento de Participación Ciudadana
El concejal de Proposta per Evissa - El Pi de Sant Antoni, Joan Torres, realizó ayer un pequeño balance del trabajo llevado a cabo en el Ayuntamiento por sus compañeros de equipo de gobierno.
Un balance muy escueto y donde únicamente criticó que, dos años después, no se haya elaborado el Reglamento Municipal de Participación Ciudadana y que no se haya creado la figura del Defensor del Ciudadano, ambas cosas incluidas en el pacto de gobierno.
Torres recordó que, en los presupuestos del año pasado, se destinó una partida de 100.000 euros para la elaboración del reglamento, aunque finalmente este dinero se destinó a la instalación de toldos en los diferentes colegios del municipio.
De cualquier forma, insistió que para elaborar dicho documento no hace falta una partida económica al efecto.