Nuevo aplazamiento. El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha suspendido este martes la vista que estaba señalada contra la expareja de Sara Calleja, la mujer que se quitó la vida en Ibiza. El acusado se enfrenta a una petición fiscal de siete años de prisión como presunto autor de sendos delitos de quebrantamiento continuado de condena, maltrato psíquico habitual y coacciones. Hace un año la vista fue suspendida por las restricciones derivadas del Covid. Este martes han sido «problemas burocráticos con Bélgica» (país donde reside el acusado) lo que motivó un nuevo aplazamiento. Según informaron desde el Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears, la vista ha sido señalada para el 23 de mayo de 2023. El acusado comparecerá por videoconferencia.
Además de las penas de cárcel (3 años por maltrato psíquico habitual, otros tantos por coacciones y uno más por quebrantamiento de condena), la Fiscalía reclama que el encausado indemnice a los hijos de Sara Calleja con 60.000 euros por los daños morales y perjuicios causados.
La víctima se quitó la vida
El Ministerio Fiscal relata que el encausado, de 60 años y residente en Bélgica, y con condenas previas por el juzgado de León, mantuvo una relación sentimental con Sara durante tres años y dos meses, cesando la relación por decisión de la mujer en septiembre de 2013. Añade que el acusado «en ningún momento aceptó la ruptura» y realizaba numerosas llamadas de teléfono y enviaba cientos de mensajes y correos con expresiones despreciativas e intimidatorias que perturbaban la tranquilidad de Sara.
Tras salir del Centro Penitenciario el acoso continuó con una docena de cartas y mensajes en redes sociales. Como consecuencia de este acoso, Sara Calleja cayó en depresión y el 11 de julio de 2015 se quitó la vida lanzándose por la ventana de su domicilio en Ibiza
El acusado tiene otras causas pendientes con la justicia española. Así, antes de mayo está citado para otra vista en León, donde está citado para diciembre por otros delitos pendientes.