La Asociación de Clubes Náuticos de Baleares se ha desplazado este viernes Club Náutico de Ibiza para celebrar su asamblea anual ordinaria y, de esta forma, dar su total apoyo al club ibicenco en esta época de incertidumbre que está viviendo mientras se resuelve el concurso para gestionar las instalaciones convocado por la Autoridad Portuaria de Baleares.
El comodoro del club ibicenco, Damián Verdera, agradeció el apoyo recibido desde la asociación y que se hayan sumado al manifiesto en apoyo de la náutica social, deportiva y cultural en el puerto de Ibiza que representa el Club Náutico desde hace casi 100 años.
Verdera recordó que siguen a la expectativa de la resolución del concurso «y tenemos la esperanza de que se pueda resolver a nuestro favor y poder salvar la náutica social y deportiva».
Insistió el Comodoro del Club Náutico de Ibiza que todo apoyo que reciban puede hacer fuerza para mantener las instalaciones, «especialmente el manifiesto que ha dado a conocer a mucha gente qué es un Club Náutico dentro de un puerto de interés general como el de Ibiza».
Casos en Mallorca y Menorca
Recordó a su vez que ha habido casos similares al del club ibicenco tanto en Mallorca como en Menorca. En el primero de los casos aún se está resolviendo el concurso y en el segundo el club como tal desapareció, se vio reducido a una mínima expresión «aunque confío en que en el futuro vuelvan a recuperar el espacio que ocupaban».
Verdera hizo hincapié a su vez en que la desaparición del Club Náutico de Ibiza «sería cerrar absolutamente la puerta del pueblo hacia el mar. El Club Náutico de Ibiza es el reducto de los ciudadanos, de todos. Representa unos amarres de unas esloras más pequeñas a precios populares, una inversión en una escuela de vela y unas actividades sociales que una empresa con ánimo de lucro no llevaría a cabo. Nosotros somos la puerta del pueblo hacia el mar y que desapareciéramos significaría cerrar esa puerta».
Por su parte Antoni Estades, presidente de la Asociación de Clubes Náuticos de Baleares, señaló que se tomó la decisión de hacer la junta directiva en Ibiza «por el mal momento que está pasando el club ya que está en juego su continuidad» y como un gesto de apoyo.
Estades reconoció que la situación actual es «preocupante porque clubes históricos están en peligro, como es el caso del de Ibiza y el de Palma», aunque por otro lado «tenemos la esperanza de llegar a un acuerdo con la Autoridad Portuaria para, de una vez por todas, sentar unas bases sociales y deportivas que nos igualen con el resto de concesionarios».
Miquel Suñer Riera, presidente de la Confederación Española de Clubes Náuticos, manifestó que la situación actual del club ibicenco es complicada y recordó que como gente nacida en las islas «tenemos el derecho de disfrutarlas y el derecho y la obligación de mantenerlas. No puede ser que todo sea dinero, grandes esloras y grandes embarcaciones y se olviden de la vida social y la vida deportiva que conlleva un club».
El apunte
Piden que se valore la vocación de marina social en el concurso
La directiva del Club Náutico de Ibiza ha reivindicado en más de una ocasión que la autoridad Portuaria de Baleares, a la hora de valorar las ofertas que se han presentado al concurso para ocupar las instalaciones actuales del club, «se valore efectivamente la vocación de marina social y que sea realmente una náutica social la que gane».
También han reconocido que a la actual directiva del Club Náutico de Ibiza «no nos da miedo la competencia, mientras sea una competencia de lo que sabemos hacer y hacemos. Estamos hablando de náutica social, promoción del deporte sin ánimo de lucro. Si viene otro club náutico y es mejor que nosotros, fantástico. Lo que no podemos es competir con una marina especulativa comercial, y parece que nuestra competidora en el concurso va por ahí».