- Si supieran que lo hicimos nosotros...
- No hables, no hables que han estado dentro del coche.
Estas son unas de las frases claves que ha escuchado este lunes la sala en la primera sesión del juicio por el incendio intencionado que calcinó los juzgados de Isidor Macabich, la madrugada del 21 de enero de 2019. Forman parte de las conversaciones grabadas durante la investigación desarrollada por la Policía Nacional a los dos investigados, dos vecinos de la isla que se enfrentan a una petición fiscal de 4 años y 10 meses de prisión y multa de 6.000 euros.
A menos de dos meses de cumplirse los cuatro años del ataque a la sede judicial y tras varias demoras, este lunes ha arrancado el juicio en la sala de lo Penal con la prueba de audios captados en el vehículo de uno de los acusados. La titular de lo Penal 1, Clara Ramírez de Arellano abrió la vista advirtiendo a los procesados que habían rechazado un acuerdo de conformidad que les permitía reducir la pena a tres años de prisión. Los acusados J. Cazorla y F. Fonseca, ratificaron su negativa y procedieron a escuchar las grabaciones presentadas como pruebas de cargo.
Los acusados
El primero en declarar fue J.C., quien rechazó las acusaciones y alegó que la conversación hacia referencia a un accidente de coche y no al incendio. «Tenía dos causas pendientes, una en Palma y otra en Ibiza y esto es una trama policial y mediática para culparme», argumentó.
Foto: Daniel Espinosa.
Preguntado por la noche de los hechos, indicó que había estado trabajando en la reparación de un motor de barco y que después, ya de madrugada, acudió a cenar a un local que abre las 24 horas.
Tras la declaración del acusado que se encuentra en prisión provisional y tras un receso para comer, la vista se retomó con la testifical del otro procesado, que también negó su participación en los hechos. El argumento de los procesados es que tenían una relación de amistad y que la Policía «les perseguía y solo nos podía detener por cuestiones relacionadas con las drogas. Unas 40 veces, cuatro o cinco a la semana», advirtió uno de ellos.
Los dos acusados fueron detenidos tras la investigación de la UDEV de la comisaría de Ibiza que también les imputó el incendio mortal ocurrido en el edificio okupa de es Viver.
Los dos acusados son juzgados como coautores de un delito de daños recogidos en los artículos 263 y 266 del Código Penal que hacen referencia a «los daños que impiden el libre ejercicio de la autoridad, afección a bienes de dominio o uso público o comunal y que ocasionan daños de especial gravedad o afectado a los intereses generales».
Los hechos se desencadenaron sobre las 04.45 horas del día 21 de enero de 2019 cuando, según la acusación, los acusados, aprovechando la poca luz de la zona y con «la finalidad de paralizar la actividad jurisdiccional al existir causas penales pendientes de tramitación en relación a uno de los implicados, actuando de común acuerdo y con ánimo de menoscabar la propiedad ajena, accedieron al edificio con la ayuda de una escalera de aluminio».
La investigación apunta a que mientras uno de ellos realizaba tareas de vigilancia el otro accedió al inmueble rompiendo una ventana del segundo piso, planta en la que se localizaba el juzgado de Instrucción número 2.
Los incendiarios utilizaron gasolina para originar el fuego y propagar el incendio que afectó especialmente a la segunda y tercera planta del edificio.
La vista oral debe continuar este martes con el resto de testificales programadas y las conclusiones.
IbizaazibiEfectivamente, una vergüenza.