Un hombre originario de los Países Bajos falleció en Ibiza el pasado mes de abril tras consumir veneno extraído del sapo bufo, según ha confirmado la autopsia al fallecido.
La Guardia Civil ha explicado a Europa Press que el suceso tuvo lugar en el municipio de Santa Eulària. Tras recibirse el aviso, los sanitarios nada pudieron hacer para salvar la vida de la víctima.
Según publica Diario de Ibiza, el cuerpo fue hallado el pasado 23 de abril en las inmediaciones de su vivienda y ahora los resultados de la autopsia han determinado el motivo de la muerte.
El hombre tenía cerca de 60 años y residía por la zona de Cala Llonga. Una mujer fue quien dio el aviso del suceso.
Cabe destacar que el consumo de esta sustancia puede provocar desde alucinaciones hasta la muerte en algunos casos.