Vecinos del barrio de Ca n’Escandell llevan años quejándose de la velocidad excesiva con la que algunos vehículos circulan por la calle des Jondal, una vía de casi un kilómetro en línea recta que une la calle des Cubells y la calle de Cas Mut.
En este sentido, una vecina de la zona explicó a Periódico de Ibiza y Formentera que esta vía tiene tres puntos críticos de accidentes, especialmente la zona en la que están ubicados los contenedores de la calle, justo enfrente de la salida de la calle es Canar. Precisamente en este lugar tuvo lugar este domingo un nuevo accidente protagonizado por un conductor que, según testigos, circulaba ebrio y a gran velocidad por esta vía estrecha de dos sentidos.
«Cada dos por tres escuchamos golpes – que suenan como bombazos – en esta calle convertida en avenida. Los contenedores están en la otra parte del vial y nos da miedo cruzar la carretera para tirar la basura porque los vehículos circulan a una gran velocidad», agregó esta residente, lamentando el último accidente ocurrido en esta zona.
Suceso
«Estábamos tranquilos en casa y, de repente, escuchamos un bombazo sobre las 20.00 horas de la tarde. Después observamos que un conductor tuvo un accidente y destrozó el chasis de un Mercedes que estaba estacionado en la calle. Más tarde vino la ambulancia y la Policía Local», recordó esta vecina. En este sentido, subrayó que, aunque esta calle dispone de badenes cada varios metros que obliga a reducir la velocidad a los vehículos, hay conductores que continúan circulando por esta zona a gran velocidad sin respetar las señalares de tráfico.
«Hace un tiempo habilitaron un semáforo fijo y un radar, pero en la parte de la gasolinera, y esto no sirve», añadió, haciendo hincapié en que se han puesto en contacto en varias ocasiones con el Ayuntamiento de Eivissa para solicitar nuevas medidas y evitar de esta manera estos accidentes, pero, según indicó, estas mejoras no llegan.
En esta misma línea se mostró el representante de una de las dos asociaciones de vecinos del barrio, Manuel Sánchez, quien afirmó a este medio que siguen reclamando un radar colocado en el punto crítico de esta zona porque la situación es «terrorífica». «Hemos hablado en varias ocasiones con el Ayuntamiento, pero va todo muy despacio», apuntó. Por su parte, el edil Jordi Grivé, concejal de barrio para Ca n’Escandell explicó ayer, tras este accidente, que se han ido implantando diferentes medidas en la zona para solventar esta problemática, como, por ejemplo, un semáforo en la calle y señales de paso de peatones con luces de led. «También hemos puesto en marcha radares pedagógicos que se ubicarán en varias calles», destacó, adelantando que se seguirán llevando a cabo más medidas para evitar estos incidentes ocurridos como consecuencia de un exceso de velocidad.
Entre ellos, nuevos pasos peatonales elevados. «Queremos que las personas crucen esta calle con total seguridad», apuntó e indicó que, además, esta vía también será asfaltada y que el Ayuntamiento de Eivissa también implantará controles de velocidad en la Avinguda de Sant Josep para evitar estas conductas y reducir riesgos.