La situación de las personas sin hogar en Ibiza vuelve a estar en el centro del debate tras la denuncia pública sobre una mujer que vive en pleno centro de la ciudad de Ibiza en condiciones de extrema precariedad. Según testigos, la mujer, que se desplaza en silla de ruedas, sobrevive envuelta en cartones.
«¿Dónde está la ayuda para todas estas personas que, con una pensión insuficiente, no pueden ni pagar una habitación?», se preguntan quienes han querido visibilizar su caso a través de las redes sociales. Una crítica va dirigida tanto a las administraciones como a organizaciones benéficas, con menciones a Cáritas y Manos Unidas, reclamando más apoyo y soluciones reales para quienes viven en la calle.
La mujer pasó meses pernoctando frente a un taller de motos, pero ahora, con el cierre de un bar en la zona, su futuro es aún más incierto. «Cuando este bar abra, ¿dónde irá?», advierten.
No quiere ir al albergue
Desde el Ayuntamiento de Ibiza explicaron que Lola Penín, concejala de Bienestar Social, gestionó una cita con esta mujer la semana pasada y no se presentó. Está siendo atendida por los Servicios Sociales del Eixample de Vila y no quiere irse a ningún albergue, según precisan desde el Consistorio. En este sentido, cabe recordar que si la persona que pernocta en la calle se le ofrece un recurso asistencial y lo rechaza, no se le puede obligar a ir. Así, muchas de las personas que duermen en la calle rechazan ir a albergues porque tienen que cumplir unas normas y horarios, por ejemplo.
Artur Tur TurSi, pero no a costa del resto.