El abogado que estuvo presente en la última conversación que tuvo Eduardo González y el joven que le dio muerte afirmó ayer al jurado que no existió discusión. El testigo explicó que el fallecido tuvo noticias de que Juan Martín iba contando a sus amigos que quería matar a Eduardo. En la reunión, que era la segunda en pocos días, apenas se trató este tema. «Eduardo le dijo que no fuera por la calle haciéndose el chulo, que era mejor que no hiciera estos comentarios». Sin embargo, según el abogado, el motivo de esta reunión no era hablar de estas amenazas, sino que Eduardo y él querían ayudar a Juan. «Le dijo que iniciara una nueva vida y que era mejor que dejara a sus amigos y se marchara de la Isla. Sólo quería ayudarle a buscar a un trabajo. No quería convencerle para que no declarara en la denuncia por abusos que habían presentado tres chicos, sino todo lo contrario, quería que Juan lo aclarara todo».
El testigo insinuó que la Guardia Civil le había mostrado al acusado, antes de detenerle por este asesinato, un informe en el que se aseguraba que Eduardo González había abusado de cuatro mil chicos. Sin embargo, el juez no quiso que se entrara en este asunto, al tratarse sólo de impresiones, y no de hechos concretos.
Sin embargo, el abogado de «Edie» aclaró que su cliente, antes de morir, había sido chantajeado por el acusado, y que le había denunciado por robarle en su casa y por pincharle las ruedas del coche. «Juan le pedía dinero y Eduardo le prestó ayuda varias veces. Cuando estábamos sentados en la heladería parecía que el acusado estaba ido, sin entrar en la conversación, pero no le gustaba mi presencia», concluyó el testigo. El juicio continúa hoy con los peritos.