Antonio A.Q., delincuente habitual de Eivissa, natural de Granada y de 31 años de edad, cayó de nuevo el pasado día 20 cuando, entonces en régimen de libertad condicional, se dirigía presumiblemente hasta sa Penya a comprar droga.
La policía le estaba esperando para que respondiera de un robo ocurrido en Sant Antoni días antes y que ya investigaba la Guardia Civil. El sospechoso fue identificado por la Guardia Civil después de que abordara a su víctima en una atraco callejero que se perpetró con el apoyo de un coche robado y que tuvo lugar en la calle Juan Sebastián Bach en la mañana del pasado día 19.
El descubrimiento de su persona se logró en un nuevo dato que se recogió en el entorno del operativo de vigilancia e investigación que tenía montado la Benemérita para dar explicación a una media docena de robos con violencia cometidos con un sistema similar de «trabajo».
En el último robo, el sospechoso no fue apresado en esa ocasión por unos segundos que para él fueron de oro. El autor de este delito atacó a un matrimonio que paseaba por la citada calle tras bajarse del turismo sustraído. El hombre le hizo cara y su valentía concluyó con la precipitada huida del sospechoso que en su nerviosismo optó por dejar abandonado el turismo cuando una patrulla de la Guardia Civil ya se dirigía a su encuentro.
Su osadía le costó heridas en la cara. La Benemérita,tras prestar auxilio a la víctima, registró el coche abandonado, en el cual se descubrió que figuraba en Comisaría como denunciado, hallando documentación del sospechoso.
La Guardia Civil adoptó nuevas medidas para intentar localizarle después de contrastar los datos ya reunidos con los recogidos tras este robo.