La explosión de gas ocurrida ayer en Valladolid y en la que fallecieron tres personas pudo originarse por la acumulación de gas registrada durante la noche en la vivienda donde se produjo la deflagración.
Según informaron fuentes del Cuerpo de Bomberos, el suceso se originó en la cocina-galería de dicha vivienda y la amplitud de la explosión corresponde a una cantidad de gas acumulada durante toda la noche. La explosión, al parecer, motivó la caída de las paredes de las viviendas G e I, esta última habitada por las tres personas que perdieron la vida en el siniestro: Jesús Asensio del Amo, de 57 años; María Jesús Serrano Pérez, de 56, y la hija de ambos, Begoña Asensio Serrano, de 23 años. La Policía Científica continúa las investigaciones para esclarecer las causas del suceso y determinar si el gas era más o menos pesado que el aire.
Durante toda la mañana, vecinos del inmueble afectado accedieron a sus viviendas para retirar algunos enseres personales y trasladarlos a los lugares en que actualmente se alojan, casas de familiares u hoteles. Los alrededores del edificio, que ha permanecido custodiado durante toda la noche, se encuentran vallados y protegidos con vigilancia policial.