La investigación que el Cuerpo Nacional de Policía ha llevado a cabo a varios niveles y en distintas ciudades y que se saldó con la detención en Eivissa de cinco personas que supuestamente componían una banda especializada de «butroneros» ha concluido que éstos mismos individuos, y sólo ellos, eran los encargados de planificar, dirigir y ejecutar los al menos ocho robos que tuvieron lugar en naves industriales de Eivissa. Esta misma investigación ha determinado que el grupo había recopilado datos sobre otros dos posibles objetivos susceptibles de ser asaltados antes de desaparecer y, al parecer, desplazarse a Cantabria, lugar desde donde alquilaron la casa de Santa Gertrudis donde fueron descubiertos.
El comisario Angel Marí se ratificó ayer en que esta banda en concreto se encuentra plenamente desarticulada de acuerdo con los múltiples datos de «gran fiabilidad» que se habían recogido tras seguirse los movimientos de la banda en Santander, Toledo, Almería y Madrid.
Marí, sin embargo, precisó que la investigación prosigue para poder localizar un dinero que se cree robado por la banda y que puede ascender a un montante de diez millones de pesetas, así como un posible zulo, vehículo o piso donde se podría haber guardado tanto el botín como más herramientas. Las diferentes informaciones recogidas por Ultima Hora Ibiza y Formentera en los últimos días, sin embargo, corroboran que las salidas de la isla estuvieron vigiladas durante al menos 48 horas.