La Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía han resuelto cuatro de los ocho atracos más importantes que en los dos últimos años se han registrado en Eivissa. Cuatro quedan aún impunes: el atraco con un hacha a una panadería de Can Bellotera, en enero del año pasado, el asalto de varios encapuchados al supermercado SYP de Ses Païsses, en noviembre de 2005, el de la pequeña gasolinera de la carretera de Santa Eulària ubicada junto al cruce de Sant Joan, también a finales del año pasado, y el más reciente, el que sufrió la dependienta de una papelería-juguetería de Jesús esta misma semana. El atraco que mayor alarma social desató fue resuelto por la Guardia Civil. El 29 de diciembre de 2004 un hombre entró en una tienda de ropa del centro de Eivissa y golpeó con un palo a la empleada, que resultó herida grave. El autor, que robó tan sólo 200 euros, fue detenido, juzgado y condenado a siete años de prisión. También en 2005 fue condenado otro atracador cuyo asalto a una tienda de souvenirs de es Pouet resultó desmedido por la violencia desplegada. El atracador, un ecuatoriano, fue condenado a cinco años de prisión, aunque la pena le fue conmutada por la expulsión del país por un periodo de diez años.
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