Luis M.G., un joven de 25 años nacido en Eivissa y con problemas con las drogas, fue detenido en la medianoche de ayer minutos después de que un taxista fuera atracado en la zona de s'Illa Plana. El sospechoso fue reducido después de que por dos veces se arrojara al mar para intentar huir y agentes de la Policía Local de Vila tuvieran que lanzarse al mar para atraparlo y de que se realizaran varios tiros intimidatorios al aire. Al mismo individuo se le relaciona con un robo idéntico que sufrió otro taxista el pasado fin de semana en Platja den Bossa, suceso del que ya informó este periódico y que también se perpetró poniendo un cuchillo en la garganta de la víctima.
Las andanzas de Luis M.G., un joven con antecedentes policiales por otros robos, terminaron después de que sobre las once y media de la noche de anteayer cogiera un taxi en la parada de ses Figueretes. Pidió al conductor, que se incorporaba a su trabajo, que se dirigiera en dirección a Talamanca y antes de llegar a la zona de s'Illa Plana sacó un cuchillo y exigió el dinero que tenía, unos 30 euros, así como las llaves del coche.
El taxista, en una rápida acción, pidió ayuda por la emisora del coche y activó la emergencia. El ladrón cortó la comunicación tras arrancar el receptor, pero le sirvió de poco. Dotaciones de la Policía Local de Eivissa, junto con otras de Comisaría y varios taxistas que supieron del suceso fueron en auxilio de la víctima.
Buscaban al sospechoso cuando uno de los taxistas vio a un individuo saliendo del agua junto al dique de Botafoc que correspondía con la descripción del ladrón: pelo negro y corto, corpulento y de 1,80 de altura. Agentes de la unidad nocturna de la Policía Local cercaron a Luis M.G. en el puerto de Marina Botafoch, lugar donde se consumó su detención después de que, incluso, el acusado presuntamente forcejeara en el agua. Posteriormente , tras una batida, se recuperaron las llaves y la emisora del taxi, no así el cuchillo usado en el robo.
El Ayuntamiento de Vila se personará en la causa para reclamar el valor de las armas y equipos dañados por el agua. Un portavoz policial aseguró que los agentes cayeron con el detenido al reducirlo aunque distintas fuentes consultadas por este diario aseguraron que los agentes se arrojaron sin titubeos al agua para evitar una nueva huida del sospechoso. Al respecto, el presidente de la Asociación de Taxista de Vila, José Serafín, agradeció expresamente la «inmejorable» respuesta y actuación de la Policía Local.
Luis M.G. fue trasladado posteriormente a Comisaría, lugar donde sufrió una crisis que obligó a trasladarle para que recibiera atención médica.