José Mourinho, entrenador del Real Madrid, intentó hoy eludir la polémica y no quiso hablar de todos los acontecimientos surgidos tras el partido ante el Barcelona en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones y remitió a la prensa a ver y analizar las imágenes «que hablan» del partido que jugaron los blancos contra los hombres de Pep Guardiola.
Cuestionado por los medios de comunicación en rueda de prensa acerca del expediente que le abrió la UEFA, por la expulsión de Pepe, por sus declaraciones posteriores al encuentro frente al Barcelona y por el anuncio de la entidad barcelonista de denunciarle ante la Comisión de Disciplina de la UEFA, Mourinho emplazó a la prensa a ver las imágenes del duelo.
«Estoy muy bien. Optimo de salud y trabajando como siempre. No quiero hablar más del tema por una razón simple. Una imagen vale más que mil palabras. En estos momentos son tantas las imágenes acumuladas y las que dan la vuelta al mundo, que si vas a traducir esa máxima, son tantas las imágenes y son tantas las palabras, que no hay más que decir, dijo.
«Quien critica mis palabras, critica las imágenes. Quien critica las imágenes, piensa que las fotos son «photoshop» y los vídeos montajes. Como son fotos y vídeos reales, son tantas imágenes y tantas palabras, que no tengo nada, absolutamente nada más que decir. Son tantas imágenes, y tantas palabras, que no tengo más que decir», agregó.
Asimismo, el técnico portugués dejo claro que por todo lo ocurrido, tiene más ganas de seguir al frente del club que preside Florentino Pérez. «Tengo más ganas de continuar al frente del Real Madrid por lo que significa el Real Madrid. La camiseta es blanca y el blanco tiene significado. Tengo más voluntad de estar en el Real Madrid», aseveró tras afirmar con una respuesta muy escueta que no tiene ninguna responsabilidad en la derrota por 0-2 frente al Barcelona.
Presión
No pudo evitar que los periodistas preguntasen una y otra vez por todas las polémicas surgidas tras el choque contra el Barcelona. Sin embargo, siempre respondió lo mismo. «No es un problema para mí la presión. Es como digo, no tengo más que hablar. Las imágenes hablan. No tengo más que hablar. A partir de este momento, nada. Todo normal para mí. Las imágenes hablan», insistió.
«No tengo más que decir. He hecho una pregunta. No he hecho acusaciones. *Por qué? Esa ha sido mi pregunta y dije que a lo mejor iba a morir sin la respuesta. A partir de ahora, las imágenes están ahí y no tengo más que decir. Si queréis continuar, puedo estar respondiendo lo mismo y no salimos de aquí. No digo más, las imágenes hablan, yo no», recalcó.
También eludió cualquier referencia al partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones que jugará el Real Madrid contra el Barcelona la próxima semana. Cuestionado por si el planteamiento que usará contra el Zaragoza puede ser el que utilice en el Camp Nou, señaló que no dará pistas para el duelo con los azulgranas.
«Pienso en el planteamiento de mañana. No voy a dar pistas para el once del Barcelona. Es un equipo construido para intentar vencer a un equipo que queremos intentar ganar. Tomaré decisiones para pensar en el partido de mañana e intentar ganarlo contra un adversario que se juega su vida. Nosotros respetamos mucho eso. Respetamos mucho la competición y queremos hacerlo bien», comentó.
También se refirió a las declaraciones de Cristiano Ronaldo, que después del partido ante el Barcelona afirmó que no le gusta el sistema defensivo que está utilizando el Real Madrid en los últimos partidos. «El puede decir lo que quiera. Es su opinión. No es un problema para mí», indicó.
Respecto a la moral del equipo para lo que resta de temporada, afirmó que todos «están bien», y añadió que no estaba enfadado después de su anterior rueda de prensa y que tampoco lo estaba en la correspondiente a la previa del choque contra el Zaragoza.
Sólo en dos momentos de la comparecencia ante los medios se mostró irónico para recordar el choque ante el Barcelona. Cuando fue preguntado por el partido del Oporto ante el Villarreal y cuando habló del descanso que ha dado a alguno de sus jugadores para enfrentarse al Zaragoza.
«No vi el partido del Oporto, pero ha sido once contra once y para una semifinal de una competición europea, ganar 5-1 es fantástico, tiene mucho mérito. Con todo el respeto por Villarreal, su gente, jugadores y afición, obviamente, me gustaría una final con dos equipos portugueses. Parece que está muy cerca», aseguró.
«Lassana y Xabi están muy cansados y no tenemos muchos jugadores en el centro del campo. Tenemos que darles un poco de descanso para poder jugar en buenas condiciones. Albiol no tiene que jugar cuando Pepe y Sergio Ramos han hecho estas acciones criminales que les han originado las tarjetas y están sancionados para Liga de Campeones. Tienen que jugar ellos mañana y no tiene que jugar Albiol. Y lo de Cristiano, pues tenemos a Benzema, Higuaín, Kaká, Adebayor y Di María...», concluyó.