Cisma en el Instituto de Medicina Legal de las Islas. El 85% de los médicos forenses, administrativos y mozos de autopsia han suscrito una carta al Gobierno en la que solicitan el cese de la actual dirección. Los firmantes sostienen que en el Instituto reina la «desorganización» y que se dan episodios de «trato vejatorio y conductas dictatoriales».
La tensión es tal en el Instituto de Medicina Legal de Illes Balears que el lunes se desplazó a Palma Ricardo Conde, director general de Relaciones con la Administración de Justicia.
Malestar generalizado
Según informaron en fuentes sindicales, el alto cargo de Madrid se reunió a las 13.30 horas en una oficina de Vía Alemania con los 13 forenses de Mallorca y el resto de personal del Instituto, para conocer de primera mano los detalles del malestar generalizado que existe.
En el encuentro, los partidarios del cese de la actual dirección, que son una amplia mayoría, justificaron su postura y resumieron la grave situación que vive en Instituto. Para este colectivo, el actual director del centro y algunos de sus colaboradores más próximos han propiciado este «clima irrespirable» que impera en los últimos meses en el Instituto. Los aludidos, por su parte, negaron de forma tajante las acusaciones y defendieron su gestión al frente del Instituto. Antes del encuentro con los forenses, administrativos, auxiliares, y oficiales técnicos de autopsias (antes llamados mozos de autopsia), el director general del Ministerio de Justicia visitó la Audiencia de Palma, la Fiscalía, los juzgados de lo Contencioso Administrativo y las dependencias de Vía Alemania, entre ellas las de los forenses.
Tras la reunión en Palma, Ricardo Conde regresó a Madrid y en la actualidad el Instituto de Medicina Legal de Palma está a la espera de las medidas que se puedan adoptar desde el ministerio.