La Guardia Civil ha detenido Eivissa a ocho de sus agentes en Eivissa, todos ellos destinados en el aeropuerto de la Isla, como presuntos autores de los delitos de apropiación indebida, falsedad documental y tráfico de drogas, informaron ayer desde la Comandancia de la Guardia Civil de Balears. Los detenidos aprovechaban los registros que practicaban durante el servicio para quedarse con «pequeñas cantidades de droga y otros objetos», señalaron desde la central balear del instituto armado.
Las investigaciones comenzaron el pasado mes mayo a raíz de la detención en el aeropuerto de Eivissa de un ciudadano búlgaro que pretendía introducir 490 gramos de cocaína en bolas de cuatro gramos cada una. El detenido denunció en su declaración ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Eivissa, la desaparición de cinco de estas bolas, de aproximadamente 20 gramos cada una, lo que dejó en evidencia la posible participación en estos hechos de los guardias civiles que habían actuado, relataron desde la Comandancia balear.
Orden judicial
Ante esta circunstancia, la autoridad judicial ordenó a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Balears la práctica de investigaciones para el esclarecimiento de los hechos. En el transcurso de las investigaciones «quedó evidenciado que, los ahora detenidos, se habían apropiado indebidamente de diversos efectos de los equipajes de viajeros, como prendas de vestir, un dispositivo electrónico, perfume, y de pequeñas cantidades de droga, falseando posteriormente el acta de denuncia».
Ayer por la mañana, la Guardia Civil ‘explotó' la operación y procedió a la detención de ocho agentes y de la compañera de uno de ellos como presunta cómplice.
Todos ellos fueron trasladados a las dependencias de la Guardia Civil en Eivissa. Al parecer, fueron detenidos en el aeropuerto. Lo más probable es que todos ellos sean suspendidos de forma cautelar de empleo y sueldo.