En la temporada turística de 2013 han muerto nueve turistas en Balears al precipitarse desde balcones o ventanas, siete en Mallorca y dos en Eivissa, con concreto uno en Vila y otro en Sant Antoni, episodios siempre relacionados con las intoxicaciones etílicas y por consumo de drogas.
El primer caso de Eivissa de este año se produjo el 1 de junio. En esta ocasión se trató de un turista de nacionalidad rusa de 35 años de edad que se alojaba en un hotel de lujo en Vila, en concreto en el Ibiza Gran Hotel. El hombre, que viajó a Eivissa junto con su pareja, llegó al hotel por la noche en un avanzado estado de ebriedad, de manera que se apoyó en una barandilla interior del establecimiento, cayó sobre el pasillo del primer piso y murió en el acto en lo que desde el hotel donde se produjo el sucesos se calificó como «un lamentable accidente».
Es triste y lamentable que tengan que recurrir a estos extremos para ser felices (que además no lo son). Espero que no se contagien los españoles.