Una empresa de venta de tíquets de varias fiestas celebradas en distintas discotecas de Eivissa advirtió, a través de las redes sociales, del robo de un talonario con 25 bloques.
Se trata de entradas genéricas para cualquier discoteca. Además, cada talón puede valer para varias personas según las entradas que quiera el comprador. El dueño de la empresa aseguró que se trata de dos chicos francófonos. «Algunos de los talones robados que me han devuelto llevaban hasta seis entradas por talón», explicó el empresario, que no quiso desvelar su identidad ni el nombre de su empresa.
Explicó que él sabe quienes son los culpables. «Son dos chicos belgas o franceses que vinieron a pedir trabajo hace cuatro días y nos robaron el talonario que estaba por allí encima. La secretaria se despistó y lo cogieron».
Harto de que le vinieran turistas a reclamar, colgó la queja en las redes sociales advirtiendo del suceso, «Me da mucha rabia porque están engañando a los turistas», se quejó enfadado antes de advertir que «son entradas robadas, las he bloqueado, pero igualmente las compran, van a la discoteca y como no les dejan entrar vuelven a nosotros a pedirnos cuentas, porque es nuestro talonario.
Yo les explico lo que ha pasado e intento que se queden contentos; les compenso con otras cosas, les ofrezco una barra libre o una buena entrada», explicó.
Según el empresario, los chicos ya llevan ganados 2.000 euros con la venta de dichas entradas robadas, «esto supone para mi un gasto de unos 1.000 euros, que es el precio de coste. Sé que estaban vendiendo por Sant Antoni, es Canar, Figueretes y Platja d'en Bossa.
Engañan a los turistas diciéndoles que les venden, por ejemplo, una entrada para Avicci por 40 euros cuando en realidad vale 65, y es mentira», comentó indignado.
De momento han sido una docena de turistas los que han ido a reclamar. El hombre aseguró que «esto ha pasado otras veces, incluso ha habido falsificaciones», aunque esta temporada a él no le había pasado». «Les ha pasado a otras empresas de Platja d'en Bossa.
Normalmente son los propios trabajadores los que roban los tíquets; venden 20 o 30 entradas, cogen el dinero y se vuelven en avión a su país», explicó. De momento la empresa no ha denunciado el robo a la policía porque «no creo que consiguiéramos nada», lamentó el empresario.