En una trepidante jornada de convivencia para conmemorar el Día Mundial de la Música y, de paso, dar la bienvenida a la llegada de la estación veraniega, el Festival Musical de San Carlos, AiCarai!, ofreció a sus miles de asistentes una verdadera explosión de música en vivo, cultura, ocio y sana diversión al aire libre.
El festival musical Ai Carai!, en su cuarta edición, demostró que se ha convertido ya en una cita alternativa ineludible para muchos dentro del panorama cultural y de ocio en la isla. Su crecimiento parece imparable, a tenor de su éxito y de la buena acogida que recibe por parte de personas de todas las edades, procedencias y estilos imaginables. Se trata de un evento de carácter abierto que impulsa la creatividad, las actividades lúdicas y la convivencia de la gente a través del hilo conductor que establecen los ritmos y sonidos musicales del mundo. De esta forma, Sant Carles de Peralta, en un estallido de luz y colorido, abrió sus brazos para acoger con cordialidad a los miles de visitantes que, a lo largo de más de 10 horas, recorrieron sus calles para disfrutar de un magnífico y animado ambiente, y para deleitarse con las actuaciones del centenar y medio de grupos y artistas que fueron desfilando por los ocho escenarios instalados en su núcleo urbano.
En este sentido, Hugo Podzamczer, coordinador artístico y unos de los organizadores del festival, indicó que «estamos muy satisfechos por la gran acogida que está teniendo este evento. Este año esperamos una afluencia masiva y poder superar las cifras de la pasada edición. Casi seguro que vamos a alcanzar las 10.000 personas».
«Se trata de un festival que está orientado especialmente a los residentes de la isla. Es una especie de vuelta a las tradiciones de la cultura musical en Ibiza antes de que llegaran los clubes de música electrónica. Como no hay muchas posibilidades de disfrutar con la música en vivo en la isla, gracias a este festival conseguimos promocionar el pueblo de San Carlos y, al mismo tiempo, demostrar que no se han perdido las raíces en lo que se refiere a la música en vivo en la calle. Para nosotros lo más importante es que la gente se lo pase bien en San Carlos e integrar cultura, música y tradición», explicó el coordinador artístico.
El festival, que este año ha contado con un presupuesto cercano a los 70.000 euros, con una aportación de 10.000 euros del Ayuntamiento de Santa Eulària, ha movilizado a más de 350 personas en el montaje y la organización del evento. Por tal razón, Podzamczer destacó que «estamos estudiando la posibilidad de solicitar para el próximo año que el festival se pueda ampliar de uno a dos días. Creo que merece la pena intentarlo porque la gente nos lo está pidiendo y por los muchos beneficios que conlleva para el pueblo, para los empresarios y para toda la gente de Ibiza».