Luis llevaba varios días evitando el tenso duelo de la 'Silla azul' de Pasapalabra. «Me estaba malacostumbrando», dijo el concursante, que se ha convertido un rostro habitual de las tardes de Antena 3 ya que lleva 28 programas en pantalla.
«Aquí te dan una curda de humildad rápido», dijo Luis instantes antes de luchar por quedarse en el programa contra Álex, que se presentó asegurando que estaba «muerto de miedo» ante el reto.
El contrincante de Luis, natural de León pero con residencia en Madrid, se define como un auténtico motero y está en el concurso por su abuelo: «No se perdía nunca el programa porque tenía mucha amistad con el abuelo de Silvia Jato», dijo.
Una vez metidos en materia, el concursante y el aspirante a concursante se jugaron su continuidad en el concurso con las letras 't' y 'n'.
Y, finalmente, Luis pudo respirar tranquilo porque ganó la batalla de la 'Silla azul' para alargar su estancia en Paspalabra.