Irene Rosales ha anunciado recientemente que no pasa por su mejor momento, pues la situación que está viviendo su marido y su familia le está afectando. Sin embargo, la mujer de Kiko Rivera ha demostrado lo valiente que es al anunciar que iba a ponerse en manos de profesionales para solucionarlo y para no dejar que nada pare el normal desarrollo de su vida, tanto personal como profesional.
«No estoy nada bien, necesito ayuda», comentó el pasado fin de semana en Viva la vida, situación anímica que ha confesado a su familia y por la que ha tomado la decisión de acudir a un psicólogo. «Me he creído que soy una súperwoman, pero no lo soy. Soy una mujer con los pies en la tierra y no puedo con todo».
La pérdida de su madre y su padre durante 2020, los problemas de Kiko con su madre, la constante exposición mediática y que Isabel Pantoja y toda su historia sea el tema más recurrente actualmente en televisión han hecho que la sevillana se sienta al límite.
De hecho, aunque intente mantenerse al margen, hay veces que se tiene que pronunciar, sobre todo porque trabaja como colaboradora en Viva la vida. Pero, el pasado lunes, incluso llamó a Sálvame para hablar con Anabel Pantoja, quien no se posiciona en la guerra entre Kiko Rivera e Isabel Pantoja para intentar no hacer daño a nadie, pero a veces defiende lo indefendible y eso provoca que no se haga honor a la verdad.
Pero, al margen de todos estos problemas familiares, Irene Rosales afronta su bajón con fuerza mientras está buscando al profesional adecuado. Buena prueba de ello es que continúa realizando su trabajo cada fin de semana en Viva la vida, pero tampoco deja de lado su labor como influencer.
En su última publicación, de hecho, se ha atrevido a compartir una foto a la que no están acostumbrados sus seguidores, pues ha posado muy sensual de espaldas y en ropa interior.
El post sirve, además, para mostrar el sujetador que lleva de ChicBack, por lo que parece tratarse de una promoción. Aun así, ha aprovechado su imagen para lanzar un mensaje de positivismo en estos momentos que vive: «Un solo rayo de luz es suficiente para despejar muchas sombras».