La escritora y creadora del universo Harry Potter, J. K. Rowling, ha sido foco de controversia en los últimos años por sus opiniones sobre los derechos de las mujeres y las cuestiones transgénero.
Ahora, la escritora ha vuelto a revolucionar el debate en X (la red social antes conocida como Twitter), tras decir que no existen niños transgénero.
La autora estaba respondiendo a un crítico que la acusó de «centrarse de manera odiosa en los niños trans». Rowling contraatacó: «No hay niños trans. Ningún niño nace en el cuerpo equivocado. Sólo hay adultos como tú, dispuestos a sacrificar la salud de menores para reforzar tu creencia en una ideología que acabará causando más daño que las lobotomías y el síndrome de la memoria falsa juntos».
A principios de este año, Rowling reveló que personas con las que trabajaba y que la habían rechazado públicamente por su postura sobre el transgenerismo le enviaron correos electrónicos o mensajes de texto en secreto para «verificar que seguían siendo amigos».
La autora reveló que sus colegas estaban ansiosos por distanciarse de ella después de que apoyara a Maya Forstater en 2019, una investigadora que llevó a sus jefes a un tribunal laboral alegando que había sido discriminada por afirmar que las personas no pueden cambiar su sexo.
Rowling ha criticado el término «personas que menstrúan» y ha dicho que el uso de palabras como «cis», que describe a personas que no son transgénero, es «lenguaje ideológico».
En agosto de este año también describió al boxeador argelino Imane Khalife, que anteriormente no cumplía los criterios de elegibilidad de género, como un «hombre que sabe que está protegido por un establishment deportivo misógino».
En junio de 2020, Rowling dijo que conocía y «amaba a las personas trans», pero agregó que «borrar el concepto de sexo elimina la capacidad de muchos de discutir significativamente sus vidas».
Tiene toda la razón, puesto que SOMOS nuestro cuerpo. Afirmar otra cosa implica la existencia de un ente extracorpóreo, como el “alma”, que podría efectivamente estar ente un cuerpo equivocado.Pero la ciencia rechaza la existencia de ese ente. Por lo tanto, desde un punto de vista científico, no podemos nacer en un cuerpo equivocado.