Las buenas maneras y formas dominaron ayer noche la asamblea general extraordinaria del CE Eivissa en la que se realizó el traspaso de poderes entre la directiva saliente, encabezada por Vicente Segovia, y la entrante, dirigida por Salvatore Coniglione.
En un ambiente de entendimiento nueve personas se reunieron para encaminar el futuro del club. Los acólitos de Segovia eran mayoría con la presencia de Juan Segovia, Antonio Fuentes, Rubén Canedo, Antonia Prats (secretaria del club) y Juan José Marí (tesorero). Mientras que en el lado de Coniglione figuraban dos personas: Braulio Díaz y Bartolomé Juan.
A pesar de la superioridad numérica los tres puntos fijados en el orden del día fueron aprobados por unanimidad. El primer punto aprobó las cuentas de Segovia al frente del club con los siguientes números: la recaudación hasta final de diciembre fue de 10.104.410 pesetas, además de 917.456 en cobros pendientes. Total, 11.021.866.
Los gastos en el mismo periodo ascienden a 11.679.179 pesetas con lo que el balance es negativo en 657.313 pesetas. Por otra parte, Segovia adelantó dinero al club con lo que su crédito a la entidad asciende a 1.574.769 pesetas que , según el acuerdo entre ambas partes, queda para el año que viene en concepto de publicidad para los gimnasios Fraile en las camisetas del equipo.
Este punto fue aprobado sin problemas y en el segundo se trató la regularización del crédito de Segovia al club, es decir, las 1.574.769 ya mencionados. También se aprobó por unanimidad. Finalmente, en el punto tres y con la presencia del abogado de Segovia, que levantó acta, y de Pepe Rosselló como delegado insular de la Federación se procedió a la dimisión de Segovia y su junta directiva y posterior aprobación de la nueva junta gestora liderada por Coniglione y que forman las siguientes personas: José Bufí Guasch, José Ruiz Vico, Àngel López García, Braulio Díaz (que será el secretario), Bartolomé Juan Juan, Jaime Rosselló Cardona y Francisco Marí Ferrer.