La selección española de balonmano tendrá como principales rivales en la primera fase de los Juegos Olímpicos de Stdney, que se disputarán el próximo mes de septiembre, a Suecia, actuales campeones del Mundo y de Europa, y a Francia, dentro del grupo B en el que quedó encuadrada tras el sorteo celebrado esta tarde en Lausana.
Junto a suecos y franceses, los hombres de Juan de Dios Román se deberán medir a Eslovenia, Australia y Túnez. Precisamente ante este último conjunto se producirá el debut del combinado español. Los tunecinos son viejos conocidos y el último enfrentamiento entre ambos conjuntos tuvo lugar en el Mundial de Egipto.
Por otra parte, en el grupo A, quedaron encuadradas las selecciones de Rusia, actual subcampeona de Europa, Yugoslavia, Alemania, Cuba, Corea del Sur y Egipto, del que, y si la lógica impera, saldrá el rival del combinado español para la siguiente fase. Sin duda, la novedad de los cuartos de final en una competición internacional hace variar los plantemientos de los combinados nacionales, sobre todo en la primera fase, como reconoció el entrenador español, Juan de Dios Román, a Europa Press. «Con este sorteo, al contar el torneo con una fase novedosa como son los cuartos de final, el tema de la primera fase no tiene vital importancia y lo realmente interesante es meterse entre los cuatro primeros lo más arriba posible para encontrar un buen cruce», indicó el seleccionador.
Sin embargo, el técnico español se mostró contrariado ante la disminución, en uno, de los jugadores que se le permite concentrar a cada combinado. «Esta es una circunstancia que me preocupa muchísimo, ya que el que sólo puedan ir a los Juegos 15 jugadores cambia bastante respecto a los 16 que suelen ir al resto de las competiciones». El propio Juan de Dios es consciente de que los principales rivales españoles en esta primera fase serán Francia y Suecia.
España tratará de repetir, al menos, la medalla de bronce de Atlanta.