El presidente del Barcelona, Josep Lluís Núñez, aseguró en la tarde de ayer que el equipo azulgrana no jugará esta noche el partido contra el Atlético de Madrid correspondiente a la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, por considerar que no dispone de jugadores suficientes y no quiere «hacer el ridículo» en la competición.
En declaraciones a la Cadena COPE, Núñez aclaró que el Barcelona cumplirá con todos los requisitos que le exige la Federación Española de Fútbol, como fijar para las 21.00 horas la hora del partido, abrir las instalaciones y hacer comparecer a los once jugadores que tiene disponibles, pero que se negará a jugar el encuentro y hará constar en el acta arbitral las razones por las que se niega a jugar.
El Barcelona, que ha convocado a sus once jugadores disponibles, dos de ellos porteros, para dos horas antes del inicio del encuentro, no venderá tampoco entradas para el partido ni convocará a los socios para que acudan a las instalaciones, explicó Núñez. «Si no podemos competir, lo regalamos (el partido); no pasa nada», señaló el dirigente barcelonista, quien dijo que, sin embargo, el Barcelona quiere dejar constancia de que su equipo «no abandona, sino que no puede jugar porque no tiene jugadores».