Lukas Vydra aumentó ayer su leyenda en la historia de la Milla Urbana Illa d'Eivissa, tras adjudicarse la victoria con un registro de 4'20'' imponiendo su fuerte final ante rivales de mucha calidad.
Vydra ya se impuso en las ediciones de 1995 y 1996 y era, por tanto, uno de los mayores conocedores del circuito ibicenco. Con 25 participantes, la salida de la milla de elite se dio a las ocho de la tarde, una hora más tarde del horario previsto después de que la prueba se aplazase por la lluvia. La carrera se planteó, desde el principio, muy lenta y los corredores marcharon en grupo compacto durante las dos primeras vueltas.
En estos primeros compases fueron José Luis Blanco y Andre Green, los que se dejaron ver en el primer paso por meta. Al segundo paso por meta y sin que el grupo hubiese aumentado a penas el ritmo de la carrera, empezaron a aparecer por la cabeza otros corredores, como Roberto García, especialista en 5.000 o el propio Vydra que iba controlando la carrera desde la segunda línea de corredores.
Entre los primeros también figuraba el olímpico Marco Antonio Cepeda, que en ningún momento dejó de vigilar a los primeros. En la última vuelta, el grupo de cabeza se redujo en unidades pero no fue hasta a falta de 200 metros para meta que se puso en cabeza el checo Vydra, que confiando en su final pegó un fuerte tirón al principio de la recta de meta que ninguno de sus oponentes fue capaz de aguantar. Al final, Vydra entró en meta con un registro de 4'20'', con dos segundo de ventaja sobre el segundo clasificado, Marco Antonio Cepeda, especialista en 3.000 obstáculos, con 4'22'', el mismo tiempo que hizo el tercero, José Luis Blanco.