La pertiguista ibicenca Mar Sánchez logró ayer su segundo título como campeona de España promesa tras cerrar un concurso de salto con pértiga marcado por el frío que reinaba en la pista cubierta de Vilafranca del Penedés. Sánchez, que el año pasado no compitió, ganó en 1999 su primer y título en la categoría. La joven también ostentaba el récord nacional en cubierta hasta que lo batió (4'21 metros) hace dos semanas en Madrid.
La joven, que milita en el club Terra i Mar de Valencia, se impuso en el concurso, con un mejor salto de 4'05 metros, por delante de Vanesa Ríos, de Salamanca, y Naroa Aguirre, del Atlético San Sebastián. Las condiciones de frío perjudicaron la competición ya que cada salto suponía un precalentamiento que agotó a las pertiguistas. Pese a esto, Sánchez, una vez ya sabiéndose vencedora pasó el listón a la altura de 4'25 metros, que suponía un nuevo récord a lograr, pero agotó sus tres intentos.
Sánchez, al término del concurso, explicó que el salto buen en este nuevo intento «ha sido el segundo, donde la fuerza y la altura eran buenas, pero al superar el listón me he pegado con el cuerpo, lo he rozado y se ha caído». No obstante, la joven confirmó que está cerca de batir de nuevo la plusmarca nacional que ella ahora mismo ostenta.
Respecto a la competición, Sánchez indicó que «al tratarse de una especialidad de tan reciente creación, todas las que lo practicamos en España somos muy jóvenes y se nota mucho la falta de alguien que tire desde arriba para que nos superemos. Es difícil cuando son las otras las que van a por una». Mar Sánchez participa el próximo sábado en un control en el módulo cubierto del INEF, en Madrid.