No pudo debutar mejor en La Ruta de la Sal el barco de Jaime Serra, patroneado por David Tur, que tomó el jueves por la mañana la salida de Barcelona (versión Norte). La Maison de l'Eléphant, perteneciente al CN Ibiza, fue la primera embarcación en llegar al puerto de Ibiza Nueva de las dos largadas la del Norte y la del Este, desde Dènia (la más corta).
El barco enfiló la bocana del puerto, junto al dique de Botafoc, sobre las cuatro y media de la tarde, tras un día tres horas y veinte minutos de navegación. Las condiciones, con vientos débiles tanto en el norte como en el este, pusieron a prueba la pericia táctica de los tripulantes de las dos versiones. La opción de La Maison que se dirigió a aguas interiores frente al delta del Ebro fue la más productiva.
Aunque inicialmente el barco sufrió una fuerte encalmada de veinte minutos, pronto acabaría su mala suerte y, mientras el resto de la flota optaba por buscar el viento en dirección a Mallorca encontrándose con encalmadas, los hombres patroneados por David Tur cogieron una corriente de viento que no abandonarían hasta avistar Tagomago a las dos y cuarto de la tarde. La llegada a Eivissa se demoró un poco más por falta de viento frente a Roca Llisa.
La tripulación, al paso por el recién inaugurado dique de Botafoc, celebraba su suerte y su victoria en tiempo real. Jaime Serra, armador y patrón del barco, indicaba su satisfacción al llegar a Ibiza Nueva y tomar tierra, tras el baño de rigor en aguas del puerto deportivo.
«Ha sido una regata fantástica, sin complicaciones, todo rumbos de ceñida con poco viento y muy táctica, en la que se ha 'trimado' el barco y se ha tenido que dar la mayor velocidad posible en todo momento y es duro porque hemos estado toda la noche de guardia, pero ha sido positivo y la verdad es que no me lo esperaba», dijo Serra.
Para Serra el «secreto» de este inesperado «éxito» moral -hoy las mediciones decidirán quién es el vencedor definitivo- radicó en la elección táctica. «Cuando apareció el viento tras la salida era racheado, 'sucio' -comentó-; así, ante su inestabilidad y la mar de fondo que había, se eligió una táctica. Toda la flota se iba a buscar el viento fuera, rumbo a Mallorca, y nosotros fuimos más bien hacia el delta del Ebro. Hemos mantenido el viento toda la noche y ellos parece que se han encalmado; al amenecer no veíamos a nadie y en el control de paso por Tagomago a las 14'30 horas estábamos destacadísimos por delante, incluso de la versión de Dènia que es mucho más corta». La tripulación de La Maison, en su trayecto hacia Barcelona, localizó y rescató a los náufragos dellaüt 'Luz' cerca de Tagomago.