El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, justificó la decisión del club de no renovar el contrato de Vicente del Bosque debido a los «síntomas de agotamiento» y «porque no era el entrenador adecuado para el futuro del club, así como Hierro ya había cumplido su ciclo en el club y lo mejor era no renovarle».
«Estuvimos seis o siete horas reunidos porque los asuntos a tratar eran importantes y tras las decisiones tomadas, me parece obligado comparecer para explicar todo un poco», comentó Florentino Pérez.
«El Real Madrid tiene un nivel de exigencia máximo a todos los niveles y es necesario abstraerse de la pasión para tomar decisiones. La junta directiva ha analizado lo mejor para el futuro del club», siguió el presidente de la entidad.
El máximo dirigente del Real Madrid hizo especial hincapié en la «ausencia de intereses económicos» entre los directivos y en la necesidad de un cambio «porque se había acabado un ciclo».
«Todos tenemos un gran aprecio personal y un enorme cariño para con Del Bosque, como cualquier socio. Es un hombre de la casa que estará siempre en el corazón de los madridistas», dijo.
«Después de muchas horas de reflexión, llegamos a la conclusión de que Vicente del Bosque había cumplido un ciclo, presentaba síntomas de agotamiento y llegamos a la conclusión de que no era el entrenador de futuro para el Real Madrid», añadió.
«Puede parecer duro y cruel, pero detrás nuestro hay cientos de millones de personas y hay que tomar las decisiones con la cabeza», resaltó. El presidente madridista defendió lo adecuado del momento para tomar estas medidas. «Es bueno hacer un cambio a tiempo. Necesitamos savia nueva en nuestra organización y es mejor tomar las medias tras el triunfo, que tras la derrota», apuntó.
Sin embargo, hace dos meses Del Bosque estaba prácticamente renovado y todo apunta a que el partido en Turín, contra el Juventus, pudo ser el punto de inflexión.
«Un partido no marca una trayectoria, pero los dos últimos meses han sido de intensa reflexión y hemos acordado que viene un nuevo ciclo, otra etapa, y que necesitábamos a otra persona. Los síntomas de agotamiento de Del Bosque han sido paulatinos. Pensamos en los pros y los contras y sólo el tiempo dirá si nos hemos equivocado», indicó.
Florentino Pérez no desveló el nombre del nuevo entrenador del equipo, aunque tampoco negó los contactos con Carlos Queiroz, el ayudante de Alex Ferguson en el conjunto inglés del Manchester.
«El nuevo entrenador debe tener una imagen acorde con la del Real Madrid. No necesitamos un entrenador estrella, pero sí que esté dotado con un bagaje más tecnificado. Lo más fácil era renovar a Del Bosque por un año, pero o le renovábamos a largo plazo o cambiábamos», explicó.
«Esto tiene su riesgo, pero no hemos venido aquí a perpetuarnos en el poder, sino a gestionar la entidad deportiva más importante del mundo», añadió el presidente madridista que reconoció que Queiroz estaba «entre los entrenadores que había pensado el club y que coincidía con el perfil requerido para afrontar el nuevo proyecto blanco».