Fernando Fernández|PALMA
El ciclismo y otras especialidades deportivas se encuentran ante un
momento crucial en vistas a su futuro y su supervivencia a nivel
competitivo. La Conselleria de Interior, a expensas de los
pertinentes informes facilitados por la Jefatura de Tráfico y el
Subsector de la Guardia Civil, tiene previsto denegar la
celebración de pruebas en los meses de julio y agosto de 2004,
además de la semana de Pascua.
La autoridad se ciñe a un decreto publicado en el Boletín Oficial del Estado, que regula las actividades de los agentes de tráfico a partir de las opeaciones de salida y llegada. Al no poder ofrecer cobertura durante los fines de semana, el calendario ciclista sufre un duro revés, pudiéndose extender esta medida a los meses de junio, septiembre y octubre.
Pero no sólo el deporte del pedal se ve gravemente afectado. Otras modalidades como el automovilismo, triatlón, motociclismo o atletismo se ven implicadas en mayor o menor medida.
En la última reunión mantenida entre los representantes de aquellas federaciones, el director general de Interior y los responsables de Tráfico y la Benemérita, se hizo saber esa decisión a los afectados, algunos de los cuales no descartan tomar medidas ante la falta de apoyo por parte de la direcció general d'Esports.La Federació de Ciclisme de les Illes Balears estudia seriamente bloquear el calendario para el año 2004, mientras que sus colegas del Triatlón pueden llegar más lejos. La medida afecta en especial a las pruebas que se celebran fuera de circuitos urbanos, aunque también alcanza una franja del calendario cargada de acontecimientos de primer nivel. Numerosas competiciones se ven afectadas por esta medida, de la que están exentas comunidades como Euskadi y Cataluña, que cuentan con su propio ordenamiento de tráfico.
A expensas de mantener un nuevo contacto con el director general d'Esports, Pepote Ballester, algunos de los implicados en este polémico caso pueden iniciar una espiral de protestas y movilizaciones que ayuden a poner punto y final a una situación que puede generar un colapso general en el calendario deportivo y llevar a grandes modificaciones en el mismo.