El PDV presentó ayer a Jordi Fernández como nuevo entrenador para las dos próximas temporadas, con opción a otra más. El técnico llega a un equipo en construcción, en el que salvo María José Alonso, con la que el club todavía no se ha reunido para decidir su renovación, no sigue ninguna jugadora de la pasada temporada. «Habrá 9 ó 10 fichajes y eso, para mí y para cualquier entrenador, es un hándicap importante. De todas formas, y eso lo hablé con Víctor Torres y Fede Marco antes de que cerrásemos mi contratación, el objetivo del club es que eso no se vuelva a repetir esta circunstancia y poner las bases para crear un proyecto de futuro», señala el técnico.
El técnico, que en las tres últimas temporadas ha dirigido al Extrugasa, no se marca aún objetivos deportivos con el PDV, aunque considera que la lucha del equipo no debe ser tan sólo por la salvación. «No me atrevo a decir que hay que luchar tan sólo por la permanencia. Esto es como en un examen: para lograr un 5, no hay que ir por el 4.5 si no por el 8. Yo soy de los que piensan que, trabajando bien, se pueden conseguir cosas que ni se esperaban», dice Fernández.
Las próximas semanas serán movidas en el tema de fichajes. «Nuestra prioridad ahora es Clara Bermejo. Tiene muchas ofertas en firme, pero espero que al final la lucha sea entre el Zaragoza y el PDV y que la jugadora se decante por nosotros. En cuanto al resto de fichajes, no hay que precipitarse ni volverse locos. Lo mejor es ir paso a paso», comenta el técnico.
Eso se hace más palpable en el tema de las extranjeras. «Todavía no está clara la normativa con las comunitarias B, por que eso supondría poder contar con siete jugadoras nacionales, tres comunitarias y dos extranjeras. Por eso, lo mejor es esperar», añade.