José Antonio Pascual|GUIMARAES
Sin tiempo apenas para dormir, para degustar el triunfo en el debut
de la Eurocopa contra Rusia, la selección española saborea con una
sonrisa el gol de Juan Carlos Valerón pero obligada a cambiar la
mirada y dirigirla hacia Grecia, el equipo que la abocó a la
repesca y que sorprendió a Portugal ante la que Iñaki Sáez podría
hacer un par de cambios. El remozado estadio Bessa XXI de Oporto,
donde juega el Boavista, albergará el miércoles el segundo
compromiso de ambos equipos, un partido en el que, según Sáez, debe
resolverse cuál de los dos es mejor después de que en la fase
previa España ganase en Atenas por 2-0 y Grecia en Zaragoza por
1-0.
El triunfo al estilo germánico impuesto por el entrenador alemán Otto Rehhagel ha trastocado las previsiones de este grupo A, por el batacazo que se ha llevado Portugal y porque, de cumplirse los pronósticos, el último encuentro entre los lusos y España podía ser un trámite que ahora no lo será en ningún caso. El cuadro de Sáez, por tanto, quiere llegar al compromiso del Alvalade con el pase prácticamente en el bolsillo, pero para ello debe superar a los helenos y de paso devolverles la moneda de La Romareda. El tablero de ajedrez del estadio Bessa ofrecerá una partida entre la estrategia puramente de contención y contragolpe de Rehhagel, y la teoría superioridad táctica y mayor ambición ofensiva de España, que tampoco se caracteriza por dejar desguarnecida su zona de atrás.
Sáez puede ofrecer diversos cambios. Está satisfecho del trabajo hecho por los catorce jugadores que actuaron en Faro, pero es muy probable que algunos de los que comenzaron como suplentes en el estadio de El Algarve tengan su opción de entrar de inicio el miércoles. Por ejemplo, Xabi Alonso es uno de los que entran en las primeras quinielas en detrimento de Rubén Baraja y hasta se vuelve a contemplar la opción de Juan Carlos Valerón, reclamado por la afición española presente en Faro y que, nada más salir, consiguió el gol del triunfo, a pesar de que el técnico casi lo ha descartado.