ITALIA | 73 |
ESPAÑA | 71 |
ITALIA (22+11+19+11):Gianluca Basile (15), Giacomo Galanda (8), Denis Marconato (8), Alex Righetti (18), Massimo Bulleri (12) -cinco inicial- Nikola Radulovic (0), Matteo Soragna (0), Gianmarco Pozzetto (0), Rodolfo Rombaldoni (2), Michele Mian (0), Roberto Chiacig (2) y Luca Garri (2).
12 de 33 en tiros de dos puntos, 12 de 35 en triples y 3 de 3 en tiros libres. 34 rebotes (18 defensivos y 16 ofensivos) y 28 faltas personales.
ESPAÑA (17+18+13+23):Pau Gasol (16), Juan Carlos Navarro (3), José Manuel Calderón (6), Carlos Jiménez (0), Jorge Garbajosa (17), -cinco inicialIker Iturbe (2), Jaume Comas (0), Felipe Reyes (9), Roberto Dueñas (4), Rudy Fernández (7) y Rodrigo de la Fuente (7).
21 de 40 en tiros de dos puntos, 2 de 11 en triples y 23 de 33 en tiros libres. 33 rebotes (23 defensivos y 10 ofensivos) y 12 faltas personales.
Àrbitros:José Carrión (Estados Unidos) y Michael Aylen (Australia). Eliminaron por cinco faltas personales a Marconatto, Bulleri y Righetti.
Fernando Fernández|HELLINIKO
La estilizada figura de Rudy Fernández emergió en el momento oportuno, y su entrada en pista dio un nuevo aire a la selección español cuando atravesaba un momento crítico. El escolta palmesano reivindicó una vez más un papel estelar dentro de los planes de Mario Pesquera y el seleccionador ha tomado buena nota. Le requirió cuando Navarro no estaba a la altura, y con 19 años hizo gala de la frescura y el descaro que le definen para ser uno de los culpables de un triunfo vital. Ante Italia había más margen de maniobra tras el triunfo de Nueva Zelanda sobre Serbia y Montenegro (87-90). Pero este resultado alteró el guión y las puertas de la primera posición, y por consiguiente un cruce más asequible, se abrieron de par en par. No era el momento más adecuado para fallar.
España recuperó sus mejores argumentos para imponerse a los siempre incómodos transalpinos (63-71) con Rudy en plan estelar y Garbajosa tirando de la nave cuando Gasol estaba ausente. Porque el jugador de los Grizzlies tuvo en Marconato a su sombra. No le dejó moverse con facilidad en la pintura, y eso lo notó España en los dos primeros cuartos. Sin su gran referencia en pista, Garbajosa y Felipe Reyes -aunque Dueñas también cumplió en los seis minutos de que dispuso- se apoderaron de la pintura.
Los italianos se basaron en su quinteto inicial para hurgar en la herida del rival. El banquillo sólo aportó seis puntos y Righetti fue una pesadilla desde la línea de 6,25 (5 de 9). Ése era el arma que esgrimía el conjunto de Recalcati, que en triples consiguió más de la mitad de los puntos totales durante los cuarenta minutos de juego. Mientras la muñeca de Righetti, Basile y Bulleri estuvo caliente, España andó perdida por la pista. Gasol veía impotente desde el banco cómo el rebote defensivo era una de las grandes carencias de sus compañeros, pero poco podía hacer desde esa posición.
Los tiros de larga distancia, pero en especial los triples (11 de 82) fueron la asignatura pendiente de un encuentro que se ponía cuesta arriba. La defensa no cuadraba e Italia mandaba con autoridad. Navarro no estaba en el partido y con un hombre menos en pista se complicaban más las cosas. Para comenzar el segudo cuarto, España recibió un contundente parcial de 8-0 en contra y alcanzó una desventaja de diez puntos (27-17). Mientras, los Bulleri, Marconato y Galanda se iban cargando de faltas, pero el equipo no notaba en exceso esa presión.