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Paseo del Barça

El camerunés abrió la cuenta al aprovechar un error de Roberto Carlos, Gio marcó el segundo y Ronaldinho apuntilló de penalti

Un grupo de jugadores del Barcelona celebran uno de los goles.

Barcelona 3
Real Madrid 0

BARCELONA: Víctor Valdés (*), Belletti (**), Puyol (**), Oleguer (*), Gio (**), Márquez (*), Xavi (**), Deco (**), Etoo (***), Ronaldinho (***) y Larsson (*).
Cambios: Damià (**) por Belletti, Iniesta (*)por Larsson y Sylvinho (*) por Xavi.

REAL MADRID: Casillas (*), Michel Salgado (-), Pavón (*), Samuel (-), Roberto Carlos(-), Beckham (-), Guti (*), Figo (*), Raúl (), Zidane (-)y Ronaldo (-).
Cambios: Owen (-) por Beckham, Celades (-)por Zidane y Solari (*)por Raúl.

Àrbitro: Undiano Mallenco. Mostró cartulina amarilla a Ronaldo y Guti.

Incidencias: Asistieron al encuentro 97.905 espectadores, que llenaron las gradas del Camp Nou, en partido correspondiente a la duodécima jornada. Un gigantesco mosaico compuesto por 92.000 cartulinas vistió las gradas del Camp Nou con la inscripción: 'Ja som (Ya somos) 125.000'. Antes del inicio del partido se lanzaron al aire 20.000 globos con los colores azulgrana. El partido fue retransmitido en directo por televisión para 83 países.

Goles:

1-0. Minuto 29, Etoo.

2-0. Minuto 44, Gio Van Bronckhrost.

3-0. Minuto 76, Ronaldinho.

Francisco Àvila|BARCELONA

Samuel Etoo, autor de un tanto y protagonista del penalti que supuso el 3-0, consumó su particular venganza y fue uno de los destacados en la lección impartida por el Barcelona, que fue muy superior al Real Madrid.

Los azulgrana vuelven a poner tierra de por medio en la clasificación tras firmar una completa actuación con Xavi y Deco, perfectos en la creación, y Etoo magnífico como estilete. El camerunés, además, aumenta hasta diez sus goles en el presente campeonato.

Los azulgrana no dieron opción alguna a un rival que no creyó en su suerte y tuvo que claudicar ante la superioridad del rival. Y es que el equipo de Frank Rijkaard demostró su superioridad en todo momento, manejó el partido a su antojo y pudo ganar por mayor diferencia de goles.

El dilema, con el balón o sin él, no admite discusión en equipos con tanto talento. En partidos como éste, para ganar, ese detalle que en otros encuentros no tiene importancia, determina el vencedor del choque y hoy el balón fue para el Barcelona.

Con intensidad y sin tregua, los de Rijkaard mostraron sus armas desde el inicio. Actuaron con la punta de agresividad necesaria y crearon muchas dudas a un rival que dio pocas señales de vida.

Los azulgrana lo tuvieron claro desde el principio. Presionaron muy arriba al Real Madrid y llegaron ante la meta de Casillas, quien en el minuto 3 vio como Larsson, sustituto de Giuly en el equipo titular, no acertó cuando estaba en una buena posición.

Deco se erigió en el director de orquesta, en la presión y en la creación. Su clarividencia permitió al Barcelona tener mucha profundidad. Conectó bien con Eto'o y con Larsson, buscó a Belletti, se entendió con Ronaldinho y hoy fue el jugador que cualquier entrenador querría tener.

El Barcelona llegó con claridad. Etoo no acertó en el minuto 20 y en una jugada de fantasía, remató de tacón en el 22, una acción que salvó bajo palos Roberto Carlos en pleno festival de los locales.

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