MONTCADA (25+17+18+21): Pérez (25), Acero (5), Griso (6), García (17), Santandreu (6) -cinco inicial- Ruiz (0), Curto (7), Ortega (2), Fabregat (1) y Pons (12).
EIVISSA BÀSQUET (25+19+14+10): Rosa (12), Moreno (15), Osa (6), Kelly (15), López (0) -cinco inicial- Pascual (17), Vázquez (11) y Cela (2).
Àrbitros: Mulet y López. Eliminaron al local Griso.
Incidencias: Pabellón Miguel Poblet al que acudieron 300 espectadores.
Àrea 11
Salió cruz. El Eivissa Patrimoni de la Humanitat salió derrotado en
su visita a Montcada i Reixac en un encuentro muy igualado que se
decidió en un último minuto en el que los de José Luis Oliete no
contaron con el acierto de la pasada jornada.
Los ibicencos realizaron un gran partido, se mostraron muy sólidos y convencidos de sus opciones de victoria, pero se toparon con un equipo absolutamente enrachado que contó con la fortuna que le faltó a los colegiales en los momentos decisivos.
Los dos equipos se metieron rápidamente en el partido pero ninguno de ellos se aplicó mucho en defensa y muestra de ello es que el primer cuarto concluyó con un abultado empate a 25. En la misma línea transcurrió el segundo acto, contraataques de los colegiales y despiestes por ambas partes. En ese intercambio de canastas los colegiales lograron irse a los vestuarios con una exigua ventaja de dos puntos en el descanso que dejaba las espadas en todo lo alto de cara a la segunda mitad.
Durante la segunda parte los ibicencos estuvieron muy serios en defensa pero con el paso de los minutos el Eivissa Bàsquet empezó a acusar el cansancio debido a la falta de rotaciones con las que contó el técnico aragonés (tenía las ausencias de Olgilvie, Díaz y Torres), algo de lo que se aprovechó el conjunto catalán que dispuso de dos puntos de ventaja para afrontar el tramo definitivo.
Sin embargo, los colegiales se metieron en el último minuto con ventaja de tres puntos y todo de cara para poder mantener la diferencia. Pero el Eivissa, que jugó bien sus bazas cometió un par de errores que le costaron el partido. Además, en ese momento apareció la figura del local Acero, un jugador que no había anotado ni un solo punto hasta ese momento, pero anotó un triple cuando nadie lo esperaba e igualó el choque.
En la próxima jugada el propio Acero recuperó el balón y fue objeto de falta que le llevó a la línea de tiros libres, donde convirtió los dos. La última posesión era del Eivissa y estuvo bien jugada pero Rosa no acertó con el triple que hubiera forzado la prórroga.
Más allá de la derrota, el conjunto que dirige Oliete realizó un gran encuentro y sigue en su línea ascendente.