Real Madrid | 4 |
Zaragoza | 0 |
REAL MADRID: Casillas, Cicinho, Woodgate, Sergio Ramos, Roberto Carlos, Gravesen, Beckham, Zidane, Baptista, Robinho y Ronaldo.
Cambios: Cassano por Baptista y Diogo por Gravesen.
ZARAGOZA: César, Ponzio, G. Milito, Alvaro, Toledo, Oscar, Celades, Zapater, Cani, Ewerthon y Diego Milito.
Cambios: Generelo por Toledo, Sergio García por Ewerthon y Capi por Diego Milito.
Àrbitro: González Vázquez. Mostró tarjeta amarilla a Beckham, Baptista, Oscar, Toledo y Zapater.
Goles:
1-0, Minuto 1, Cicinho.
2-0, Minuto 5, Robinho.
3-0, Minuto 10, Ronaldo.
4-0, Minuto 60, Roberto Carlos.
Isidro Santos|MADRID
El Real Madrid rozó el milagro en el Bernabeú ante el Zaragoza, pero se ahogó en la orilla después de hacer un esfuerzo tremendo para alcanzar un 5-0 que le abría las puertas de la final de la Copa del Rey, en la que estará el equipo aragonés gracias al 6-1 que logró en la ida. Hacía muchos años que el Real Madrid no protagonizaba una gesta como la que pretendía esta noche. Se había vendido que la remontada era posible, pero pocos creían en la capacidad del equipo blanco para convertir en realidad un hermoso sueño. Si el camino hacia una remontada hay que empezarlo a toda velocidad, el Real Madrid cumplió esa premisa a la perfección. Arrancó con el motor a miles de revoluciones, se llevó por delante a su adversario en el primer ataque y firmó el 1-0 a los 57 segundos de partido, con un zapatazo espectacular de Cicinho desde fuera del área.
El Zaragoza, convencido de lo imposible de la misión madridista, apenas se alteró. Para el equipo blanco fue una dosis extra de moral. Y el nivel de adrenalina se disparó en el Bernabéu cuando aún no se habían cumplido cinco minutos de juego. Robinho aprovechó un pase de Ronaldo dentro del área y batió a César con un disparo raso y cruzado. La explosión de júbilo en las gradas fue aún mayor con el tercer tanto, obra de Ronaldo tras una pase magnífico de Beckham. El Real Madrid sólo necesitó diez minutos para situarse a dos goles de la frontera de cinco que le separaba de la final. Tenía ochenta por delante para hacer el milagro.
El equipo de Víctor Muñoz, aturdido por la avalancha que se le vino encima, fue un juguete roto en manos de los futbolistas de Juan Ramón López Caro. Sólo un remate de cabeza de Ewerthon que Casillas salvó bajo palos (m.11) puso en peligro la integridad madridista. En ese momento el partido se durmió y se llegó al descanso con este 3-0. Ronaldo y Robinho rondaron el gol en la recta final del primer tiempo y el Zaragoza se fue a los vestuarios en el descanso con el miedo en el cuerpo. El Real Madrid, seguro de que la hazaña era posible.