| Suecia | 2 |
| Inglaterra | 2 |
SUECIA:Isaksson (**); Mellberg (**), Lucic (**), Edman (**), Linderoth (**); Alexandersson (**), Ljungberg (**), Jonson (**), Kallstrom (**); Larsson (**) y Allback (**).
Cambios:Elmander (*) por Allback, Wilhelmsson (*) por Jonson y Andersson (-) por Linderoth.
INGLATERRA:Robinson (**); Carragher (**), Ferdinand (*), Terry (**), Ashley Cole (**); Beckham (**), Lampard (**), Hargreaves (**), Joe Cole (**); Rooney (**) y Owen (-).
Cambios:Crouch (*) por Owen, Gerrard (**) por Rooney y Campbell (*) por Ferdinand.
Àrbitro:Massimo Busacca (SUI). Amonestó a Hargreaves (min.76) en Inglaterra y a Alexandersson (min.83) y Ljungberg (min.87) en Suecia.
Goles:
0-1, minuto 34, Joe Cole.
1-1, minuto 51, Allback.
1-2, minuto 85, Gerrard.
2-2, minuto 90, Larsson.
Efe|COLONIA
Inglaterra salvó la primera plaza del grupo B, que le llevará a un cruce de octavos a priori más asequible, ante Ecuador, evitando así a la anfitriona, después de salir ilesa del asedio de Suecia (2-2), especialmente en la segunda mitad, en la que los nórdicos estrellaron dos balones en el palo y cercaron por momentos la portería de Robinson. Los pross, con el regreso de Rooney a la titularidad, parecieron mejorar su imagen en el primer acto, pero se relajaron en exceso en la segunda e incluso pudieron sufrir un disgusto si Suecia hubiera tenido de aliada a la diosa fortuna.
Los nórdicos, que se sabían segundos porque Trinidad y Tobago no podía obrar el milagro ante Paraguay, se lanzaron a por la primera posición, que tenía el premio de alejarse de un enfrentamiento con Alemania. Suecia bombardeó el área inglés con balones aéreos que Inglaterra no supo defender. Eriksson, ante la incompatibilidad de sus centrales, recurrió incluso a Campbell, pero los suecos igualaron el tanto inicial de Joe Cole, a la media hora de juego y de bella factura con una volea desde treinta metros, con otro magistral cabezazo de Allback e hicieron sufrir a todos los «hooligans».
Primero, Larsson estrelló un balón en el palo, y seis minutos después Mellberg hizo lo propio. Se repitió además instantes después con un remate del zurdo Kallstrom que sacó bajo palos Gerrard. Inglaterra estaba contra las cuerdas y ninguna de sus aparentes estrellas respondía como debiera. Tampoco Eriksson encontraba soluciones desde el banquillo aunque cuando lo hizo encontró fortuna.