Xavi Gil ya no estará en los entrenamientos de la SE Eivissa. El preparador físico finiquitó ayer su contrato con la entidad rojilla. El que fuera la mano derecha de Joan Francesc Ferrer Rubi, entrenador contratado por el club ibicenco el pasado verano y destituido tras la derrota en el campo del Alcoyano (4-0) el pasado 2 de noviembre, puso ayer el punto y final a su ciclo rojillo al firmar la liquidación en las oficinas de Can Misses, donde se había reunido previamente con el gerente Andoni Valencia.
«Todo está cerrado y finiquitado», comentó el preparador físico poco después de rescindir su contrato con la SE Eivissa. «Después de que los dos abogados se pusieran de acuerdo, hemos firmado un documento que pueda dar seguridad a los pagarés que el club hará efectivos». Xavi Gil continuará esta semana en la isla y se marchará la próxima semana.
El preparador ha vivido una situación un tanto extraña en su etapa en la SE Eivissa. Tras el despido de Rubi, el club le comunicó que contaba con él, pero, poco después, fue apartado a través de una carta. Finalmente, regresó a los entrenamientos y colaboró hasta el lunes en los entrenos de Quique Yagüe. Eso sí, con denuncias de por medio, pues no había sido dado de alta en la Seguridad Social ni recibió tanto parte de su salario como las ayudas pactadas para su vivienda. Finalmente, y tras varios dimes y diretes, ambas partes han llegado a un acuerdo para su adiós.
Con quien no lo hay aún es con Rubi, cuyo contrato aún no ha sido liquidado. El técnico y Andoni Valencia acudieron a un acto de conciliación en el TAMIB el pasado lunes y no sirvió de nada. Todo hace indicar que el caso Rubi va para largo.