El 'clásico' ibicenco por antonomasia, Eivissa-Peña Deportiva, ya está a la vuelta de la esquina. Hemos entrado en la semana previa al derbi de la necesidad, uno de los más igualados y decisivos que se recuerdan debido a la delicada situación deportiva que atraviesan unos y otros.
Ambos equipos, sobrepasado el ecuador del campeonato, miran con cautela y nerviosismo la tabla clasificatoria, esa que les mantiene en puestos de descenso y que cada vez les aprieta más, les oprime con mayor virulencia.
En una temporada histórica para el fútbol pitiuso, resulta doloroso ver como los aspectos extradeportivos han salpicado y salpican la actualidad de ambos equipos. Pasada la tormenta que arreció sobre Can Misses en los últimos meses, la presión por sumar de tres en tres y la necesidad de incorporar nuevos refuerzos está provocando mucha ansiedad en el vestuario. El bueno de Alfredo Santaelena, encima, tiene la misión de recuperar la moral de sus futbolistas, su estado anímico y su confianza, minadas por otros aspectos como el económico.
Jugadores como Àngel Sánchez, posiblemente uno de los mejor dotados de la categoría, ni siquiera aciertan a entender primero, y explicar después, su nueva y extraña relación de enemistad con la pelota.
En la Peña Deportiva las aguas parece que empiezan a bajar algo turbias. Hasta que llegaron las Navidades, en la Villa del Río sólo se hablaba de fútbol. Ahora empiezan a salir a la luz aspectos ajenos a los terrenos de juego, pero que afectan al rendimiento de la plantilla. Lo cierto es que el vestuario no está tan unido a su técnico, Luis Elcacho, como podría parecer. Varios futbolistas del equipo, incluso de los llamados titulares, no ven con buenos ojos el poder que ha asumido el técnico dentro del club, su falta de tacto -por decirlo suavemente- hacia ciertos jugadores de la plantilla o sus métodos de trabajo, sobretodo con los teóricos suplentes.
Además, el ex entrenador del Eivissa ha sido y es el responsable de todas las altas y bajas que ha dado el club en el mercado de invierno. Por eso, en principio, Elcacho cumplirá esta temporada su contrato, a pesar de la preocupante situación deportiva del equipo, que ya está a cuatro puntos de la salvación.
La historia
La Peña acumula 12 derrotas en liga, cuatro más que su eterno rival, y llegará al derbi con tres puntos menos y la necesidad acuciante de ganar, por vez primera, fuera de casa. Pero echando la vista atrás, el bloque de Santa Eulària parte con muchas opciones de sacar algo positivo en su visita a Can Misses. Está el encuentro de la primera vuelta, en el que los peñistas dieron un auténtico repaso a los rojillos ganando por 2-0 y ofreciendo una victoria sin precedentes a su afición en Segunda División B.
Los últimos derbis disputados en el estadio de Vila se saldaron con tres victorias locales (1-0 en 2006/07, 2-1 en 2004/05 y 1-0 en 2000/01), dos victorias visitantes (0-1 en 2005/06 y 1-2 en 1998/99) y cuatro empates, el último allá por la temporada 2003/04 (0-0).