Guillermo RomaníFORMENTERA
La primera edición de la Media Maratón Popular Illa de Formentera finalizó ayer al mediodía con un gran éxito de participación. Había un total de 101 inscritos, de los que 87 cruzaron la línea de meta.
En categoría masculina se impuso Antoni Marí, del Triatlón Santa Eulària, con un tiempo de 1.16.49. El campeón aventajó en poco menos de minuto y medio a Àngel Blanco, que invirtió 1.18.16 en recorrer los 21,097 kilómetros de los que constaba la prueba. En tercer lugar se clasificó Esteban de la Heras, del equipo El Hotel Pachá, que completó la carrera con una marca de 1.19.48.
En la categoría femenina venció la local Maribel Verdera que tardó 2.04.47 en cubrir hacer la media maratón y que como comentó al cruzar la meta no sólo era su primera media maratón, sino también su primera competición deportiva; en segundo lugar entró Palmira Ledesma a más de tres minutos y media y la tercera clasificada fue Anabel García que llegó a algo más de un minuto de la segunda clasificada.
Como nota anecdótica, la participante que llegó la penúltima, la 86ª clasificada, Laura Mesanza, invirtió 2.25.33, y, cuando ya estaba mediada la entrega de premios, llegó la 87ª clasificada, Myriam Alemany, quien cubrió el recorrido en más de tres horas. Su llegada a la meta hizo parar la entrega de premios, pues todos los participantes y el público asistente se puso en pie y le dedicó una cerrada ovación por su esfuerzo y tenacidad.
Marí: «Fue duro»
Marí, el ganador, explicó al término de la carrera que había sido una carrera «muy dura» y que el tramo final se le había hecho eterno, algo que obviamente le sucedió también al segundo clasificado, Àngel Blanco, que llegó a la meta zigzagueando. De hecho, tras cruzar la línea tuvo que ser atendido por los servicios médicos, pues sufrió un desfallecimiento del que afortunadamente se repuso más tarde.
La carrera se había iniciado en el faro del Pilar de la Mola a las 10,00 horas. El presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer, dio el bocinazo de salida. Los corredores tuvieron que afrontar en la primera parte de la prueba un tramo de casi tres kilómetros de pronunciado descenso y curvas cerradas, que castigó duramente las piernas de los participantes antes de llegar a es Caló, desde donde la carretera era prácticamente llana excepto en un pequeño repecho poco antes del desvío a Ca Marí. Tras pasar por Sant Ferran, los atletas se dirigieron hacia es Pujols y, después de correr entre s'Estany Pudent y las salinas den Marroig, llegaron al Paseo Marítimo de la Savina, donde estaba instalada la meta.
La llegada del ultramaratoniano Dani Serra, que hace poco cubrió los 100 kilómetros de Madrid, se retrasaba de forma inusual para un experimentado corredor como él, pero el misterio se aclaró al final. Corría junto a su mujer Eva María Tur, a la que no dejó en todo el rato. «Sabía que podía completar su primera media maratón y he querido esta con ella», confesó. En la línea de llegada aparecieron sus hijos pequeños, y Dani entró en meta con ellos en volandas apenas dos segundos después de su mujer. Hubo más parejas como Bartomeu Roig y Micaela Monferrer. La ganadora absoluta, Maribel Verdera, también contaba en la línea de salida con su marido, Carlos Tur, pero él tuvo que retirarse. Ella subió tres veces a lo más alto como primera femenina absoluta, primera de Formentera y primera de su categoría.