El fútbol sala brillará esta temporada de la mano del Gasifred Atlético, el Consell d'Eivissa y los distintos ayuntamientos pitiusos. Así se ha decidido después de las dos infructíferas reuniones producidas tras las polémicas afirmaciones de Vicente Bufí, en las que no compartía la idea de que organizaciones ajenas a la Federació de Fútbol de les Illes Balears (FFIB) realizara competiciones escolares.
«Sigue adelante el proyecto organizado por nuestro club con el patrocinio del Consell d'Eivissa y de todos los ayuntamientos de la isla. Junto a nosotros, el resto de clubes de fútbol sala está ilusionado con el proyecto y cuenta con muchas ganas de trabajar para que esta iniciativa salga bien. Todos dependemos del trabajo de la base para que nuestro deporte pueda ir en alza», afirma el comunicado público remitido por el Gasifred Atlético en la mañana de ayer.
Tal y como indicó Juanan Torres, coordinador de las escuelas deportivas del Gasifred y portero del primer equipo, primero se produjo una cita entre Rafael Albert, nuevo responsable de fútbol sala insular a nivel federado; Rafa Triguero, conseller d'Esports; Ricardo Ruétalo, coordinador del recién creado proyecto de fútbol sala; y el propio Juanan. Al parecer, la delegación expuso que no se podía incluir el término liga en las competiciones extraoficiales por no ser competencia de ellos, por lo que el proyecto utilizará el de diadas.
Anteayer hubo una nueva reunión, en la sede de la delegación y con Vicenfe Bufí, delegado insular de la FFIB, en ella. Juan Ortiz y Juanan Torres acudieron como miembros del Gasifred. Según comentó este último, en ella se escuchó «la propuesta de la federación». «Bufí dijo que iban a intentar poner en marcha el fútbol sala, fomentando el tema de la doble licencia para que los que jueguen a fútbol también puedan hacerlo a fútbol sala. Tienen la intención de hacer una Regional, pero eso es lo que menos interesa. Queremos niños jugando. Es muy difícil que esa propuesta funcione con las tarifas y precios que manejan».
Juan Ruiz estalla
Juan Ruiz, gerente y presidente en funciones del Gasifred, tiene la mente puesta en el nuevo proyecto de fútbol sala después de vivir continuos toreos por parte del ente federativo. «A la misma federación ya le dije en su momento que había puesto el fútbol sala a la altura de la basura mientras señalaba una papelera», apuntó.
«Nos han llamado de Jesús, de Sant Antoni, de Santa Gertrudis, de Sant Joan e incluso de barriadas como Figueretes o San Pablo. Nos avasallan a llamadas. Los precios son un 50 por ciento más baratos que los de federación, que nos tiene pura envidia. No quiero más combates», continuó Juan Ruiz, que lanzó una pregunta retórica: «¿Es delito querer al fútbol sala?»
El gerente del Gasifred subrayó que «el compromiso es de un año». «Si es un fracaso o va mal, lo dejaremos. Es más, si demostramos que el fútbol sala funciona, tenemos el compromiso del Consell, nuestro mediador, de tratar de llegar a un acuerdo con la federación antes del inicio de la próxima temporada para ver si se pueden traspasar las competencias», explicó Ruiz, que, como muchos otros, sólo pretende reflotar un deporte que la delegación insular ha dejado morir.