La deportista ibicenca Rosario Bonet regresa del Campeonato del Mundo de Wushu, celebrado en Kuala Lumpur (Malasia), con un sabor de boca agridulce aunque con la satisfacción de haberse codeado con las mejores especialistas de esta disciplina marcial.
La representante ibicenca en la selección española no pudo asomarse a los primeros puestos dentro de las tres modalidades en las que tomaba parte, aunque demostró su depurada técnica alcanzando puntuaciones muy interesantes en la cita oriental.
El viernes compitió en la modalidad de puño (Chang quan) finalizando en la vigésimo cuarta posición con una nota de 7.57. En esta categoría tomaron parte 32 deportistas.
El sábado le llegó el turno en la modalidad de espada (Jianshu), donde mejoró sus prestaciones para concluir en el vigésimo puesto con 8.25 puntos.
El lunes se despidió de su participación en el Mundial rayando a un gran nivel en la prueba de lanza (Quiangshu), firmando un decimoctavo puesto con un 9 de nota final.