Los tres grandes clubes de fútbol de Eivissa, Peña Deportiva, San Rafael y Portmany, se enfrentan a un fin de ciclo en sus respectivas cúpulas directivas. Así lo han confirmado en las últimas semanas los portavoces de las comisiones gestoras de la Peña y del San Rafael, Juan Marí y Paco Bonet, respectivamente, así como el presidente del Portmany, Juan José Forneri, quien agota legislatura.
Los quebraderos de cabeza que viene levantando la coyuntura económica desde hace varias campañas y los problemas derivados para cuadrar los presupuestos, además de los sinsabores deportivos que han dejado recientemente los primeros equipos de cada entidad, han precipitado la voluntad de cambio en la zona noble de los tres ‘grandes' de la isla.
El caso más llamativo es el de la Peña Deportiva de Santa Eulària. La eliminación del equipo de Ormaechea a las primeras de cambio en la fase de ascenso a Segunda B, a manos del humilde Anguiano riojano, precipitó las sorprendentes palabras de renuncia de su máximo mandatario durante las cinco últimas temporadas, el empresario Juan Marí Dalias. «Hasta los ‘cojones' de fútbol» –interpeló en caliente tras la derrota del equipo hace dos semanas–. «Estamos cansados, no tenemos ningún contrato de por vida de estar aquí, llevamos muchos años remando, pagando deuda, haciendo temporadas memorables y esto cansa mucho, creo que es hora de cambio», indicó Marí el pasado 25 de mayo. El club medita anunciar en las próximas semanas la apertura de un plazo para la presentación de candidaturas a la presidencia del club y la convocatoria de la Asamblea General Extraordinaria para liquidar el presupuesto del ejercicio 2013-14 y, si procede, nombrar una nueva junta directiva que ponga fin a la gestora liderada por Juanito Dalias.
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