PEÑA DEPORTIVA, 1 - MALLORCA B, 3
De imposibles no se vive. Así salió la Peña a jugar la vuelta de la segunda eliminatoria de la Copa Federación frente al Mallorca B, con un 2-0 en contra. A pesar de la derrota de ayer por 1-3 y su eliminación de la Copa, fuerza y ganas no les faltaron a los de Dani Mori, que salieron al terreno de juego con un once poco habitual en liga, repleto de suplentes y jugadores no convocados en los partidos de liga.
En los primeros minutos, el conjunto peñista salió con la intención de meter el primer tanto lo antes posible para remontar una eliminatoria que se le había puesto cuesta arriba en la ida. En el minuto ocho, Terán metió miedo en el cuerpo de los mallorquinistas con un disparo que se fue fuera de los tres palos. Los locales no querían tirar el encuentro.
A Claverías le costaba entrar en la dinámica de su equipo, con indecisiones a la hora de controlar los balones y precisión en los pases. En el minuto 17, Luna por la banda izquierda estuvo a punto de estrenar el marcador, pero le faltó puntería en su disparo. Durante los primeros 20 minutos, las oportunidades ‘sin fortuna' eran de la Peña.
Los pupilos de Olaizola no se encerraron atrás y en el minuto 23 de partido sacaron petróleo de una jugada al provocar un córner. Si los primeros 20 minutos eran del club de la Villa del Río, los restantes hasta el final de la primera parte se decantaron del lado del Mallorca B. La Peña notaba los nervios tras no marcar un gol en la primera media hora de juego. Rubén Martínez metió el susto en el cuerpo de sus compañeros tras un mal despeje que, por suerte, Ángel estuvo acertado y desvió a córner.
Las internadas de la Peña por banda derecha se quedaban en polvo. José Eloy no tenía el día y le costaba controlar el balón para encarar a sus rivales. Los bermellones dijeron basta y en el 37 Enzo dribló al portero local para subir un tanto al luminoso. El partido se le puso cuesta arriba a la Peña.
Los santaeularienses no bajaron los brazos y en el 42 Luna, tras un pase de Ramón Arcas, enganchó un balón para anotar un auténtico golazo y empatar el encuentro. Los dos quipos se fueron así al descanso con tablas en el marcador.
El cuadro local necesitaba tres goles más para superar a los mallorquines. Dani Mori movió ficha al meter a Pau Pomar, como mediocentro defensivo, y Piquero, en ataque. Nada más iniciar el segundo tiempo, Luna lanzó por encima del travesaño tras una falta fuera de la línea del área. Ése fue uno de las pocos peligros que generaron los locales.
Los bermellones, en el minuto 77, aprovecharon una mal despeje de Claverías para que Alberto Fernández anotara a placer. Rodado anotó el 1-3 tras otra indecisión de los peñistas la hora de sacar fuera el balón.
El partido acabó 1-3 y la eliminatoria, 1-5. De esta manera, el club de Santa Eulària se despide de una Copa Federación en la que exhibió garra y pundonor, pero también una falta de pegada que le condenó a decir adiós al torneo. Ahora, es hora de pensar en el próximo encuentro de liga, el domingo en el feudo del Ferriolense.