HC EIVISSA: 22
ELCHE: 29
El HC Eivissa no pudo dar la campanada contra el líder, el Elche. El equipo naranja pagó cara su mala primera mitad, en la que llegó a ir perdiendo hasta de nueve goles. Con todo, fue capaz de meterse en el partido tras la reanudación, cuando se puso a dos tantos de la igualada, pero la reacción llegó tarde y pasó factura en forma de cansancio, lo que permitió a los visitantes escaparse de nuevo en el marcador y apuntarse su cuarta victoria en cuatro partidos.
Los ilicitanos no tardaron en poner tierra de por medio. Pasados los primeros cinco minutos ya ganaban por tres goles de diferencia (1-4, min. 6) tras una diana de Manu Vázquez. Al filo del cuarto de hora se rompió el partido. Tras el 5-10 anotado por Marc Torres, un parcial 0-4, con goles de Gil (2), Aitor García y Manu Vázquez situaron un más que preocupante 5-14 en el tanteador a falta de diez minutos para llegar al descanso.
Félix Mojón, entrenador del conjunto naranja, se vio obligado a parar el partido con un tiempo muerto. No pintaba nada bien el panorama y había que frenar como fuera el gran momento rival.
Pese a que la máxima diferencia se repitió en el minuto 27 (8-17), el HC Eivissa se las apañó para dejar la distancia en seis dianas al término del primer tiempo, que se cerró con 11-17 en el electrónico.
El cuadro ibicenco se puso las pilas tras el asueto. Salió decidido a dar la campanada a pesar de que lo tenía todo en contra, puesto que perdía de seis y, encima, contra el líder, no contra cualquier otro. La casta y el carácter de los naranja salió a relucir con un parcial 6-2 en los primeros ocho minutos que apretó el marcador a un esperanzador 17-19.
El Elche le vio las orejas al lobo y decidió pedir tiempo muerto para arreglar sus desajustes defensivos. Lo cierto es que le dio resultado. Ganó consistencia en la retaguardia y recuperó la efectividad en ataque para endosar un 3-0 que volvía a separarle en el marcador (17-22, min. 43).
El partido entró entonces en una fase de intercambio de golpes que sólo beneficiaba, lógicamente, al que iba por delante, el Elche. Las diferencias se movían entre los cuatro y cinco goles. Fue en los dos últimos minutos cuando el cuadro visitante pudo estirar aun más el marcador para apuntarse la victoria por 22-29 en un partido con dos tiempos muy diferentes y un resultado final que no refleja la realidad de un voluntarioso y combativo HC Eivissa.