Laura Mesas considera que, a estas alturas del siglo XXI, «todavía hay mentes que no evolucionan» en cuanto al tema de la igualdad de género. Y no le falta razón. Su hija, Andrea Ródenas, no tenía permitido jugar esta temporada con el San Rafael cadete dado que el Reglamento General de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) prohibe las categorías mixtas a partir de cadetes, categoría a la que la jugadora rafelera acaba de dar el salto. Sin embargo, el ‘caso Andrea' tiene, afortunadamente, visos de solucionarse después de la gran repercusión que ha tenido el asunto, el cual llegará la próxima semana incluso al Parlament. Y es que los deportistas de 14 y 15 años aún forman parte del programa escolar del Govern, por lo que éste instará a la FFIB a cambiar su régimen, si bien ya se están dando otra serie de pasos para que pueda jugar ya el próximo fin de semana.
El ‘caso Andrea', destapado por PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA el pasado lunes, debería llegar a su punto final la semana que viene. Anteayer se iniciaron n la sede de la delegación insular unos trámites para que todos los clubes pitiusos se comprometan a no impugnar ningún encuentro en el que tome parte la joven jugadora. Esta petición será presentada a la FFIB mañana mismo.
Mesas imaginaba que «este fin de semana no jugaría, porque no iba a llegar todo a tiempo para tramitarle la ficha». Con todo, confía en que todo cambie en los próximos días: «La verdad es que sí confío en que juegue la semana que viene. Si no, todo este follón no habrá servido para nada».
En este sentido, se mostró sorprendida por «la gran repercusión» del caso. «Yo estoy alucinando», agregó. La progenitora de Andrea Ródenas quiso destacar la ayuda recibida por parte de tanta gente: «Todo el club se ha volcado con el tema y muchos padres han ido recogiendo firmas por colegios y otros sitios. Me decían ‘dame hojas, que me las llevo'. Nos han ayudado mucho». No hay que olvidar que Laura Mesas, en una idea que tuvo otra madre, inició una recogida de firmas para que su hija pudiera jugar con los cadetes. Incluso en Change.org existe una campaña para ello, la cual supera el medio millar de rúbricas.
Sobre el sentir de Andrea, Laura Mesas indicó que «es verdad que ella estaba un poquito decepcionada, porque tenía mucha ilusión en jugar con sus compañeros». «No quedaba otra que seguir adelante y tratar de llegar hasta el final», añadió la madre de la futbolista. Eso sí, ahora confiesa que está más animada: «Ella tiene claro que quiere jugar en el San Rafael. Si no puede ser, se buscarán soluciones. Su mente está en el San Rafael y supongo que no tendremos más problemas para que pueda jugar ahí». Por si acaso, ya fue a entrenar un día con el Atlético Jesús, de la Liga Balear, una experiencia que calificó como positiva.
Hay que recordar que todo hace indicar que las niñas podrán seguir jugando con los niños en categoría cadete, pero no en la juvenil, a diferencia de otras autonomías como Andalucía, donde sí pueden hacerlo. El Programa para el Deportes Escolar del Govern ya no afecta a citada categoría, por lo que la lucha por la igualdad, entonces, debería ir por otros caminos. De todas formas, Laura Mesas no está preocupada por ello. «Yo creo que vamos a conseguir que las niñas puedan jugar hasta cadetes, que ya es algo, porque así saldrán con 16 años, serán más maduras y podrán viajar. Todo será distinto».